ESCÁNDALO

El gran dolor con el que cargaría Enrique Ponce tras su separación de Paloma Cuevas

El torero no soporta más la angustia.
lunes, 11 de octubre de 2021 · 11:15

Tras más de dos décadas de relación, Enrique Ponce y Paloma Cuevas le han puesto punto final a su matrimonio. En julio, la expareja ha separado oficialmente sus caminos y se han divorciado definitivamente. Más allá de la ruptura y años de batalla, el diestro mantiene un buen vínculo con su ex, por el bienestar de las hijas en común.

Según ha oficializado El Español, Enrique Ponce extraña demasiado a sus herederas. "Le duele tenerlas lejos", aseguraba una fuente allegada al torero y dejaba a la vista que sufre la distancia con sus hijas, quienes residen en Madrid con su madre.

Por otra parte, se ha confirmado que el vínculo con Paloma Cuevas "no ha experimentado ningún cambio" y cada día mejora más. Más allá del dolor por la distancia con sus hijas, el torero cuenta con el apoyo especial de su gran amor, Ana Soria. Al parecer, la joven de 22 años lo acompaña y lo contiene cuando los días se ponen difíciles. 

Ana lo comprende en todo y le anima a viajar y a pasar tiempo con sus hijas. 

Por el momento, Enrique Ponce disfruta su maravilloso presente, más allá de la presión por presentar a Ana a sus hijas. Según fuentes cercanas al torero, "es demasiado pronto" para que las pequeñas conozcan a la pareja de su padre, tras meses de romance a escondidas. Incluso, recientemente una de las hijas de Ponce ha festejado su comunión y Ana ha esquivado este incómodo momento. 

Mientras Enrique disfruta de su espectacular noviazgo, Paloma se ha enfocado en su carrera y ha dejado en claro que "no tiene tiempo para una relación sentimental", ya que sus prioridades son completamente distintas a las de su ex.