PRESTA ATENCIÓN

Los signos del zodíaco a los que más les cuesta controlar los celos

Hay personas que son extremadamente desconfiadas cuando están en una relación.
jueves, 23 de diciembre de 2021 · 04:30

Una de las razones por la que muchas parejas jóvenes deciden poner fin a sus noviazgos muy pronto es porque uno de los dos no puede ocultar sus celos. Suelen confundir estos sentimientos que los obnubilan y no hacen más que dañar al otro con amor. Según la astrología, hay determinados signos que se caracterizan por ser muy desconfiados. 

Gracias al conocimiento de los astros, podemos detectar ciertas particularidades que se repiten en algunos signos que describen su manera de ser, de sentir, pensar y accionar ante situaciones especiales como cuando ven a sus parejas relacionarse con otras personas. 

De hecho, la astrología nos dice que existen tres signos del zodíaco que son demasiado celosos cuando están en una relación y nos revela sus motivos. Los de Escorpio, Géminis y Cáncer, por lo general, son muy desconfiados y no pueden ocultar sus celos. Por muchos esfuerzos que hagan, terminan arruinado su noviazgo porque se vuelven extremadamente controladores de su pareja.

Los nacidos bajo el signo de Escorpio tienen una obsesión con lo que los demás piensan acerca de ellos. En el intento por descubrir qué opinan sobre su persona, pueden terminar muy mal, perjudicando a quien quieren por inventarse historias. Aunque en la etapa de conquista pueden demostrar seguridad, tarde o temprano sacarán a relucir sus celos.

Al ser personas muy desconfiadas, los de Cáncer siempre están permanentemente prestando atención a todas las señales, pero suelen interpretarlas de la manera equivocada. Suelen ser muy manipuladores y cuando los celos los invaden se vuelven completamente ciegos, no son capaces de escuchar ninguna razón. Prefieren creer en la realidad que crearon en su mente.

Los nacidos bajo el signo de Géminis acostumbran a desconfiar de la otra persona porque eligen dejarse llevar por su imaginación en lugar de ponerse a pensar si realmente merece la pena preocuparse. En esos momentos los celos se vuelven incontrolables y terminan perjudicando sus relaciones.