La desconocida historia de amor entre Charo Vegas y Joan Manuel Serrat

Charo Vega se ha vuelto a sentar en el plató de “Sálvame” el pasado viernes, esta vez, para hablar de ella y no de los secretos de sus amigas. Las confidencias que ha sacado a la luz la han llevado a distanciarse de las Flores, Isabel Pantoja y el hijo de Carmina Ordóñez, Francisco Rivera. En esta ocasión se cuela en la historia de la nieta de Pastora Imperio, uno de los nombres más universales de España: Joan Manuel Serrat.

La hija de Gitanillo de Triana, ha vivido sus propios tormentos. Estuvo internada en más de una ocasión en clínicas de recuperación y de hecho, su propia familia, ha contado que la mediática ingresó a la clínica psiquiátrica “López-Ibor” por temas de depresión y estados de salud mental delicados. Pese a esto, no todo en la vida de Charo fue turbulencia: también hubo tiempo para el romance, y uno de ellos fue con el gran cantante catalán.

Comenzaba la década de 1970, Charo Vega era una belleza que no podía opacarse con facilidad. En esos mismos años Joan Manuel Serrat se había enamorado de la modelo Mercedes Doménech, quien en 1969, reveló que sería madre de un pequeño llamado Queco, fruto de su romance con el cantautor. Terminada su relación con la modelo (no sin antes, hacerse cargo económicamente de Queco y darle su apellido), Serrat posó sus ojos sobre la bella amiga de Carmina Ordóñez. La historia entre ambos comenzó en Madrid, a donde “el Nano”  viajaba con frecuencia y los veranos, los pasaban juntos en Marbella.

Como cualquier otro artista de la época, Joan Manuel Serrat era todo un rompecorazones. Al parecer en su romance con Charo Vega tuvo siempre bien en claro, que no quería atarse con nadie “de por vida”.  Por esta misma razón, la historia entre “la gitanilla” y el de Barcelona se enfrió pronto. Incluso, se rumora que por aquella época, Lolita Flores, amiga de Charo, estaba loca de amor por Joan Manuel. El poeta, sin embargo, siempre la consideró una amiga, algo que hizo trizas sus ilusiones.

El romance entre Joan Manuel Serrat y Charo Vega llegó a las portadas del corazón en 1973. Sin embargo, años más tarde, en entrevistas concedidas por la misma nieta de Pastora Imperio, se supo que la diferencia de edad que había entre ellos (14 años) impidió que el amor se consolidara.