La Reina Letizia quedó plantada por sus propios anfitriones y las cámaras lo captaron todo

A lo largo de sus años como Princesa de Asturias y como Monarca, la Reina Letizia ha protagonizado algunos momentos desafortunados en público que ponen de los nervios al personal de logística que organiza sus entradas y salidas en cada evento al que asiste. Sea provocado, un mero accidente o producto de su descuido, ella jamás desluce, tal como informó "Vanitatis".

Al menos en esta ocasión, quedó que la Reina Letizia no tuvo que ver en nada con el último enredo en el que se vio inmersa. A pesar del desajuste protocolar y el "trágame tierra" que tan solo le duró escasos segundos, pudo resolver la forma de salir airosa, pero para su pesar, el penoso momento quedó inmortalizado para las redes sociales.

Ocurrió durante el acto que tuvo lugar en el Congreso de los Diputados, en el que la Reina Letizia acudió para presidir el homenaje a Clara Campoamor por su destacada labor para favorecer la lucha por la aprobación del voto femenino en España. A su llegada, lo esperado es que en la fachada del Parlamento, Su Majestad sea recibida por algún representante del organismo, pero al bajar del coche, no había nadie para recibirla.

A medida que se acercaba al acceso del Patio de Floridablanca, insólitamente nadie salía al paso, así que en un rápido intento por hacer tiempo y disimular la ojeada que echó hacia el interior en busca de alguna autoridad presente, la Reina Letizia se dirigió a sus excolegas periodistas para saludarles con un amable "Buenos días, ¿qué tal?".

Sin embargo, la incomodidad le duró muy poco a la disciplinada Consorte, cuando rápidamente salieron a su encuentro la presidenta del organismo oficial, Meritxell Batet, la presidenta del Senado, Pilar Llop, y la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo. Aliviada, la Reina Letizia prosiguió con lo propio del encuentro como si nada hubiera pasado.

Según "Vanity Fair" relatan algunos presentes en el lugar que Carmen Calvo sí estuvo minutos antes de la llegada de la Reina Letizia en las afueras del Hemiciclo, pero luego decidió esperar del lado adentro, y lo ocurrido fue una lamentable consecuencia entre la última decisión de esta y la llegada de la Soberana con un cortísimo margen de diferencia.

Una vez dentro del lugar, la Reina Letizia procedió a cumplir con todo lo establecido en el orden del día. En todo caso, el desajuste protocolar no fue sino un detalle mínimo ante el desplante de los partidos independentistas ERC, JxCAT y Bildu, que mostraron su descontento ante la presencia monárquica y prefirieron ausentarse. Por supuesto esto en poco o nada amilanó su ánimo.

No obstante, para Meritxell Batet fue de suma relevancia la presencia de la Reina Letizia en este homenaje y así lo dejó claro al finalizar su discurso. “Muchas gracias, Señora, por haber aceptado presidir esta celebración y de este modo dar mayor resonancia al recuerdo y al legado de Clara Campoamor”.