Los tétricos cambios de la Reina Isabel para su día final: Reino Unido ya tiene el luto preparado

La Reina Isabel siempre veló a lo largo de su reinado por lograr que la Institución que representa sobreviva al implacable paso del tiempo, en un mundo globalizado que va en franca contradirección con sus modos y costumbres medievales sin contar con su funcionamiento casi analógico. Hay que admitirlo incluso desde las posiciones menos monárquicas: su legado es no menos que intachable y brillante.

Como brillante e inolvidable será su final: un escenario inminente que la Reina Isabel tiene en cuenta, al igual del resto de su país que aún resiente ante la idea de perderla. Si bien todo lo planificado en temas de exequias y liturgias está perfectamente preparado para cuando venga lo peor, para la precavida Soberana es justo y necesario hacer una repasada y contemplar algunos cambios mínimos en el itinerario.

El código que sacudirá los cimientos de "Buckingham"' será conformado por la frase clave "London Bridge is down" que en su traducción al español sería "cayó el Puente de Londres". Tal como el Príncipe Felipe, con la Reina Isabel también aplica el curioso término: para los Windsor, los puentes en este sentido único, representan el paso de la vida a la desaparición física. Es por ello que  Palacio anunciará su fenecimiento en clave cifrada.

Luego de ello, ¿qué sucederá? En principio se entiende que la Familia Real deberá permanecer junto a su lecho por unos breves momentos y en silencio para mostrar sus respetos, mientras el secretario privado de la Soberana, Andrew Parker, se comunique directamente con el Primer Ministro de la nación, que en este caso y por ahora sería Boris Johnson.

Varios autos funcionarios de la Institución comunicaran la penosa noticia sobre el fallecimiento de la Reina Isabel a los principales gobernantes de Estado y a las naciones de la Commonwealth. Desde allí, las agencias de noticias británicas notificarán al resto del mundo la fatídica noticia mientras el luto reviste a la nación.

Hablando de emisoras, el medio "El Independiente" ofreció un dato que podría ser perturbador desde el ángulo en que se mire. Si bien la cadena pública "BBC" no tendrá la exclusiva, lleva desde hace años una parrilla de programación ininterrumpida, preparada para cualquier eventualidad, de hecho los reporteros y anclas de los espacios informativos, llevan a cuestas trajes oscuros de forma obligatoria, en caso de que el evento final de la Reina Isabel ocurra en cualquier momento próximo.

Por supuesto, la prevención es tema de orden ante una situación tan telúrica: este canal posee un sistema de transmisión que se diseñó desde los tiempos de la Guerra Fría, que permitiría la transmisión sin interrupciones incluso, si el país fuera blanco de un ataque extranjero. De hecho, no solo los medios están preparados sino las redes sociales y la web oficial de la Corona, estos espacios digitales ya cuentan con un diseño especial ante la partida de la Reina Isabel.

En franco contraste de las exequias militares que recibió su esposo, la Reina Isabel si recibirá toda la pompa y majestuosidad de los honores de Estado. Miles de ciudadanos podrán apreciar el féretro pasar por las calles, la caminata real se realizará y otros detalles contemplados. La Reina Isabel finalizará la segunda era Isabelina, a todo color y luces. Hasta ahora es la última disposición que se tiene prevista.