Seis razones por la que no dejarás de comer semillas de chía nunca más y mejorarás tu salud

A pesar de que su tamaño es llamativo por lo pequeño, las semillas de chía son uno de los alimentos más potentes que seguramente no dejarás de incorporar a tu dieta, a partir de estas revelaciones.

Es que estos granos diminutos se caracterizan por ser una excelente fuente vegetal de ácidos grasos poliinsaturados que sirven para sustituir al huevo en las preparaciones veganas, por ejemplo.

Pero, ¿qué es esto que vuelve a las semillas de chía tan atractivas? Es que es rica en ácidos omega-3 que los aporta junto a ácidos grasos omega-6 en una proporción perfecta para el organismo de las personas.

Incluso, un artículo publicado recientemente por Cuerpo mente, reveló que las semillas de chía son una gran fuente de minerales tales como el magnesio, el calcio y el boro.

Además, en estos granos se puede encontrar un alto contenido de fibra, tanto soluble como insoluble, lo que hace que las personas no tengan “antojos”, se mantengan saciados y regulen el tránsito intestinal.

Como si todo lo mencionado fuera poco, las semillas de chías, a diferencia de otras,  tiene un gran contenido de antioxidantes que sirven para prevenir el enranciamiento de sus propias grasas.

Un detalle que no debe ser pasado por alto, es que las semillas de chía sirven para proteger el corazón y reducir el colesterol, debido al elevado contenido en omega-3, que resulta un ácido esencial que cuenta con propiedades antiinflamatorias, antitrombóticas y vasodilatadoras que ayudan a regular la presión arterial y el colesterol en sangre.