La cuenta pendiente que la Reina Isabel no logró saldar con alguien de su pasado

La vida de la Reina Isabel sin duda alguna afronta en estos tiempos una serie de turbulencias, puesto a que tuvo que afrontar la pérdida del gran amor de su vida y como si esto no fuera suficiente los constantes ataques de su nieto Harry no cesan.

Ser parte de la monarquía no ha de ser tarea fácil, puesto que hay que cumplir con cientos de normas y preconceptos, pero, sin duda, sería mucho peor observar cómo tu hermana es privilegiada por haber nacido antes y es llamada reina, con el poder absoluto en sus manos desde muy joven. Algo parecido pasó entre la Reina Isabel y su hermana la Princesa Margarita.

La relación que la Soberana tuvo con su hermana no fue todo color de rosas como la mayoría piensa, sino que transitaron por ciertos momentos muy difíciles que provocaron un distanciamiento irreparable entre ellas.

Todo comenzó cuando su tío, el Rey Enrique VIII, abdicó al trono y el padre de las hermanas pasaría a ocupar su lugar, convirtiéndose en el Rey Jorge VI del Reino Unido, algo que las tomó por sorpresa y definitivamente aún más a quien es hoy la Reina Isabel, pues en aquel momento pasaba a ser la futura heredera al trono, por ser mayor que Margarita.

Desde aquel inesperado hecho, las vidas de la Princesa Margarita y la Reina Isabel comienzan a distanciarse irremediablemente, pues la diferencia de sus títulos nobiliarios sacaría a flote lo peor de sus más oscuros deseos.

Las hermanas comenzaron a tratar de atacar la autoestima de la otra, ya que, en una oportunidad, Margarita le aseguró a la Reina Isabel que si no fuera por su puesto asegurado en el trono nadie se acercaría a hablarle, algo que dictaba la competencia que se estableció entre ellas.

Pese a las muchas oportunidades que tuvieron, ni la Reina Isabel ni su hermana Margarita habrían solucionado sus diferencias y fue así como en el año 2002 la Monarca experimentó una de las situaciones más dolorosas de su vida ante el fallecimiento de su querida hermana.

Sin duda alguna, esta sería la cuenta pendiente que la Reina Isabel no logró concretar con un ser querido, y ahora que corren tiempos difíciles en su vida es cuando comienza a extrañar a todos sus afectos.