Este caldo de cúrcuma revolucionará todas tus comidas

La cúrcuma es una especia que se puso muy de moda en el último tiempo, es el ingrediente que no puede faltar en un curry. Además, es utilizada para condimentar salsas, guisos y otros platos de Oriente y del Sudeste Asiático. Tiene innumerables beneficios, hace bien a la salud, es utilizada para aliviar y tratar problemas hepáticos y estomacales. Sus propiedades antiinflamatorias y antidepresivas la convierten en un ingrediente único. 

La cúrcuma tiene muchos usos, por ejemplo es un buen colorante para quesos, mantequillas y mostazas. Además, se puede usar para preparar el famoso cúrcuma latte o leche dorada, es muy fácil de hacer, solo se necesita leche vegetal, cúrcuma, canela y pimienta negra. En este artículo podrás aprender a hacer un delicioso caldo de cúrcuma y jengibre. 

Ingredientes

⅔ tazas de caldo vegetal

1 cucharada pequeña de cúrcuma fresca

1 cucharada pequeña de jengibre fresco rallado

1 diente de ajo

1 pizca de pimienta negra

Aceite de oliva virgen

Sal marina

Elaboración

Para comenzar vamos a verter en una olla un poco de aceite de oliva y luego le agregaremos el jengibre, la cúrcuma y el diente de ajo, machacado previamente. Luego mezclaremos la preparación por unos minutos y le añadiremos el caldo vegetal, lo dejamos cocinar a fuego suave durante 10 minutos. Para finalizar pasaremos la preparación por el túrmix y le agregaremos sal y pimienta. 

“Es ideal para los días fríos o para cuando te sientes un poco bajo de energía y por supuesto es estupenda para mejorar un resfriado”, explicó Marisa Aguirre, autora del libro Super Sopas. También es muy útil para tratar distintos trastornos digestivos, sirve para evitar las flatulencias gracias a que es carminativa. Otros la utilizan para tratar los problemas hepáticos ya que es un gran tónico biliar que protege el hígado. 

Es un gran aliado para los pacientes que sufren de artritis reumatoide gracias a sus propiedades antiinflamatorias. También ayuda a tratar la depresión, en la medicina tradicional china la utilizan para curar los problemas psicológicos, como la depresión o el estrés.