Así fue el pasado oscuro que a Joan Manuel Serrat le gustaría olvidar para siempre

Cuando escuchamos el nombre de Joan Manuel Serrat seguro pensamos en poesía, maravillosas letras que combinadas con la música pueden transportarnos a mundos distintos y además expresan en palabras lo que sentimos y a veces no sabemos explicar.

Cualquiera pensaría que Joan Manuel Serrat siempre se dedicó a la música, y en parte es cierto que este mundo fue el motor de su vida, pero no comenzó siendo cantante, sino que al inicio de su carrera tuvo que aparecer en películas para promocionarse como le sucede a varios artistas.

Fue popular en la década de los 60 y 70 que los principiantes en la música grababan films de muy bajo presupuesto y un guión pobre, pero que rápidamente subían a la taquilla y esto les permitía mostrarse, el cantautor catalán no fue la excepción.

Muchos seguidores de Joan Manuel Serrat probablemente no recuerden esta faceta suya puesto que él sólo grabó tres películas, que posiblemente fueron obligadas por contratos y que pronto dejó de hacerlo, aunque no le costó demasiado subirse a la fama más adelante.

Los productores que representaban a Joan Manuel Serrat en sus comienzos, pronto se dieron cuenta que no hacía falta que él se sometiera a eso, pero quedarán por supuesto en el recuerdo. La primer película romántica en la que apareció fue en 1968 y llevaba de título "Palabras de amor", un año después llegó "La larga agonía de los peces fuera del agua" y finalmente "Mi profesora particular".