El detrás de escena más triste que tuvo que enfrentar Camilo Sesto

Si hay un artista que supo ser ícono de España y que a pesar del paso del tiempo jamás será olvidado, ese es Camilo Sesto. Su enorme carisma y la manera de desenvolverse con pasión en todo lo que hacía le dieron las herramientas necesarias para ser reconocido por todo el mundo.

Camilo Sesto supo acariciar el éxito, su carrera musical contó con más de 40 producciones discográficas, varios discos de platino y una cantidad exorbitante de álbumes vendidos en todo el planeta, sin embargo el cantante español siempre vivió con una mirada bastante melancólica de la vida.

El público lo llenaba de cariño y siempre lo elogiaban, pero a pesar de esto por lo visto Camilo Sesto siempre sentía que algo le faltaba para ser completamente feliz y no disfrutaba del todo de los regalos que la fama le ofrecía.

En varias entrevistas, Camilo Sesto confesó que tenía una manera muy particular de vivir el éxito, pero que eso hacía que la fama jamás se le subiera a la cabeza ni lo convirtiera en un pedante egocéntrico; aunque para la opinión de muchas personas podría significar una forma de golpearse a sí mismo.

Me siento en un sillón, tenso todavía, busco en mi discoteca algunos fragmentos musicales que me resultan especialmente patéticos, que me ayudan a meditar, a sentirme menos eufórico y triunfador.

Por lo visto luego de los aplausos y todo el amor que recibía de su público, Camilo Sesto se sentaba a reflexionar que no siempre podría tenerlo todo en la vida y casi boicoteaba su propio trabajo, aunque desde su mirada esa era su manera de no sentirse más que otros. "Utilizo un sistema muy particular para entristecerme, para recordarme a mí mismo que no siempre he tenido eso y que probablemente no durará toda la vida", expresó.