COINCIDENCIAS AGRIDULCES

Los inolvidables desamores de Lolita que la llevan a compararse con su madre, Lola Flores

Lamentablemente, entre madre e hija no solo se hereda el talento y el encanto.
domingo, 12 de septiembre de 2021 · 06:30

Si hay algo que ha caracterizado al clan Flores conforme el paso del tiempo fue que las revistas y los medios contaron con un lugar fijo para varias de sus integrantes. Lola y Lolita Flores, madre e hija, compartieron sangre, sudor de escenario y lágrimas derramadas por algún infortunio del amor. La heredera de La Faraona es quien fue más habitué de fracasos del corazón.

Lolita Flores ha pasado por todas en la vida y su cuerpo curtido de experiencia sabe bien lo que es que el destino baile al compás de la rumba apasionada o se haga un bollo sumergido en el desamor y la desidia sentimental. Pero como bien ha dicho en una de sus últimas publicaciones de Instagram, ella puede salir de esas como bien sabe. “No necesito compasión sino ser yo misma. No quiero que me pasen la mano por el lomo como a los perros”, manifestó en sus redes días atrás.

A la hora de abrir el corazón, la intérprete de “Pena, penita, pena” se asemeja a su madre. Mantiene un eterno agradecimiento a sus exmaridos, aunque en el caso de Lolita, Guillermo Furiase siempre va a ser el hombre especial de su vida, ya que juntos se convirtieron en padres de Elena y Guillermo. “Él me ha dado lo mejor de la vida: mis hijos”, afirmó en una entrevista en “Mi casa es la tuya” años atrás.

Junto a Guillermo vivieron un hecho que quedó inmortalizado en la cultura popular, como cuando en su masiva boda, Lola Flores fijó como un tatuaje en el inconsciente colectivo nacional la frase “Si me queréis, irse”. Desde entonces ha corrido mucha agua bajo el puente y el trato entre ambos es más que grato.

Estoy abierta al amor aunque sé que a los hombres les doy miedo.

Una suerte de cuenta pendiente rodea a la artista y es la de encontrar a su compañero de vida, ese que le haga brillar los ojos como a una niña, pero así como desearía encontrar a ese festejante que le quite el aliento con un beso, comprende que si esa persona no llega es por el peso de su fama. “Ser un personaje popular, ser madre, siempre te condiciona. Te debes a tus hijos, a tu público, pero lo llevo bien”, ha llegado a decir la cantante, quien parece acompañar los años que le quedan aferrada a una ilusión.