DESPIADADA
Los motivos que llevarían a Isabel Pantoja a ocultar la verdad sobre la salud de Doña Ana
Sus hijos, Isa y Kiko Rivera, sufren las consecuencias.
El viernes recibimos una de las noticias más alarmantes. Desde el jueves a la noche, mismo día que Anabel Pantoja cerraba su unión en completo secreto con Omar Sánchez, Ana Martín fue ingresada al hospital. La noticia fue primicia de “Sálvame”, mismo medio por el que Kiko Rivera e Isa Pantoja se enteraban de la difícil situación de su abuelita. Del otro lado rondaba el silencio. Una vez más, Isabel Pantoja optaba por callar.
Isabel Pantoja y sus hijos, Kiko Rivera y Chabelita, no tienen la mejor de las relaciones. Con Kiko claro está, ya que hasta denuncias hubo de por medio. Con Isa la cuestión se embadurnó más de fango y agua podrida cuando la oriunda de Perú quiso mantener una postura neutral en el conflicto.
La tibieza no estaba pactada en la pelea así que tanto Chabelita como Anabel Pantoja sufrieron las consecuencias de ambos bandos. Si bien Kiko Rivera era el que más agresivo se mostraba, decidió poco a poco empezar a bajar guardia.
Ahora, el DJ asegura que estaría dispuesto a firmar un acuerdo con Isabel Pantoja, su madre, con tal de volver a acercarse a su abuelita, Doña Ana, quien padece de amnesia desde hace varios años.
Este es el escenario actual de una de las familias más conflictivas de España. Sin embargo, lo que todos los medios y periodistas se preguntan es ¿por qué calla tanto Isabel Pantoja? ¿Acaso esta situación tan extrema no puede mover un poco sus límites? Se ve que no, estamos ante una auténtica “Dama de Hierro”.
Es claro que la estrategia de Isabel Pantoja siempre fue mantener perfil bajo en todas las acusaciones que recibía, iniciadas por su hijo. Pero el anonimato y el silencio no pueden pagar las cuentas y convengamos que la tonadillera tiene muchas que saldar.
Jalando directamente desde el punto, resulta preocupante el hecho de que Isabel Pantoja no haya cogido el teléfono para llamar a sus hijos, conociendo el inmenso cariño que estos guardan hacia su abuela. Deshumanizada, despiadada, insensible y tantos otros adjetivos que quedarían a medio camino para definir este gesto por parte de la cantante.
