DE ARMAS TOMAR

La última estrategia de Isabel Preysler que Julio Iglesias nunca le podrá perdonar

La socialité española habría empezado el año con total alegría, sin recordar siquiera al cantante español.
sábado, 8 de enero de 2022 · 07:25

La socialité Isabel Preysler ha conseguido en las últimas semanas estar rodeada de las personas que más aprecia; sin alejarse de su novio, el escritor Mario Vargas Llosa, la madre de Tamara Falcó se encontraría llena de dicha por haber logrado lo que hace unos meses parecía imposible. 

Fue en las festividades navideñas y de Año Nuevo cuando la filipina se vio rodeada de sus hijos, Tamara, Chábeli, Enrique, Ana y Julio José. Este esperado encuentro se dio en Miami, en la casa de Chábeli Iglesias, la primera hija de su matrimonio con el cantante Julio Iglesias

De hecho, la familia contaba los días para poder reunirse después de las restricciones impuestas por la crisis sanitaria del 2020. Así que la llegada de las fiestas decembrinas fue la oportunidad perfecta para que el clan volviera a estar unido. Preysler acaparó a sus amados hijos para ella sola en estas festividades, sin importar si el padre estaba o no por esos lares. 

Es bien sabido que durante gran parte de la infancia, Chábeli, Julio José y Enrique estuvieron en su mayoría acompañados por su madre, quien intentaba establecer un hogar, mientras Julio Iglesias veía crecer su fama viajando de concierto en concierto por todo el mundo. 

Llena de felicidad, esta sería la última estrategia de Isabel Preysler que el cantante español nunca podrá perdonar: el hecho de reunirse con todos los hijos de su matrimonio, sin que exista una gota de nostalgia hacia el cantante. 

Isabel Preysler y Julio Iglesias fueron una de las parejas más famosas de la década de los 70, no solo en España, sino en el ámbito del entretenimiento internacional. Quizás en el preciso momento de su boda no eran tan conocidos como lo fueron cuando despegó la carrera musical de Iglesias.

Una carrera que le trajo dichas y desdichas, pues habrían sido los compromisos artísticos y las constantes giras lo que llevó a Isabel Preysler a tomar la decisión de pedir el divorcio en 1978. Desde allí, la socialité no le ha cerrado las puertas al amor. Y a la par de una vida en la mira de los focos, siempre ha intentado mantener a su familia unida, lo más importante para ella.