Qué hizo Íñigo Onieva antes de la reaparición de Tamara Falcó: “Se llevaba las manos a la cabeza”

En “El programa de Ana Rosa” se destapó la olla sobre las reacciones que tuvo Íñigo Onieva momentos antes de que Tamara Falcó decidiera poner el pecho a la bala y salir a hablar con la prensa sobre la ruptura amorosa. 

La periodista Beatriz Cortázar comentó detalladamente que el empresario se habría juntado con su amigo íntimo, Javier Hungría, y se habría desenvuelto con angustia y gran pesar de dolor: "No paró de desahogarse, confesarse con su amigo, se llevaba las manos a la cabeza, gesticulaba sin parar... su amigo solo escuchaba pacientemente".

Poco después de que Tamara Falcó diera las famosas declaraciones ante los medios de comunicación, el empresario respondió con ímpetu. "La entiende perfectamente, a pesar de que le fastidie, sabe perfectamente lo dolida y decepcionada que está", afirmó la reportera. Asimismo, agregó: "No pierde la esperanza de poder recuperar esta relación".

Los últimos datos que salieron a la luz de Íñigo Onieva es que estaba mal y sin empleo. De cierta manera, intenta sobrevivir a un momento muy oscuro y lo hace "sin querer dejar rastros". En este sentido, inmiscuyéndose en la crónica rosa, el presentador de "Ya es mediodía", Joaquín Prat, lo invitó al exyerno de Isabel Preysler. a que hable sobre lo que pasó y que no cobre dinero por ello. 

Este impulso de Prat trascendió tras revelarse que Onieva cobraría un dineral por contar detalles de su ruptura con Tamara Falcó. "Entre 40 y 60.000€ es lo que pagarían en este momento a Íñigo Onieva por dar sus primeras palabras, dependiendo lo que contase", dejó trascender la reportera sobre el empresario en diálogo con el popular presentador. Ahora la decisión queda en manos del joven. ¿Saldrá de la oscuridad para hablar y sin cobrar una moneda por ello? El tiempo dirá.