España conmemora el Día de la Hispanidad el 12 de octubre, fecha elegida por ley y considerada una de las celebraciones más importantes del país. Tradicionalmente, se desarrolla un desfile militar que es presidido por el Rey y la Familia Real, pero, en este caso, hubo suspiros por una gran ausencia. 

Es el segundo año en que el Rey Felipe, la Reina Letizia y la Infanta Sofía asisten a la jornada festiva sin la compañía de la hija mayor, la Princesa de Asturias. Leonor se encuentra estudiando en el Bachillerato Internacional en el UWC Atlantic College de Gales, en Reino Unido. A pesar de que está justificada, se notan aires de soledad en su hermana, Sofía.

 La Infanta acompañó a sus padres luciendo un vestido de Carolina Herrera, algo incómodo para su gusto, ya que era notable su problema con el vuelo de la falda y el viento que corría. Sin embargo, lo que aún era más “notorio” es el impuesto lugar que le toca asumir ante la ausencia de la hija de la Corona de España.  

Sucede que Sofía de Borbón y Ortiz debe ocupar el sitio de su hermana, algo que ocurrió el año pasado y que mantuvo a los Reyes pendientes de ella y su comodidad. De hecho, todavía existen gestos en la pequeña Borbón que demuestran lo mucho que extraña a su “otra mitad”.  

¿Un guiño a la Princesa Leonor? 

Como habíamos mencionado antes, la Infanta Sofía dio un pasito más a la adultez al elegir un vestido de Carolina Herrera. Se trata de una prenda moderna y sencilla, que le da un toque de madurez sin perder de vista la alegría de la juventud. Estampado de lunares como el de su madre, corto, con vuelos y de color azul, el vestido nos inclina hacia una duda: ¿Podría este look interpretarse como un guiño a la heredera dado que el color es el simbólico del Principado? Pronto lo sabremos.