La decepción de Cayetano Martínez de Irujo en la misa de su madre la Duquesa de Alba

Para Cayetano Martínez de Irujo la ausencia de sus hermanos, otra vez, en el recordatorio por el octavo aniversario de la muerte de su madre, la Duquesa de Alba, es una decepción difícil de digerir y lo dejó de manifiesto en las puertas de la iglesia Nuestro Señor Jesús de los Gitanos, de Sevilla. 

Con gesto de desilusión, Cayetano Martínez de Irujo explicó que para él "es un orgullo enorme que mi familia esté unida y que vengamos aquí a darle el homenaje que merece una vez al año". Pero claro, se refería a su exmujer, Genoveva Casanova, su hijo Luis y su pareja, Bárbara Mirjan.

Los que pegaron el plantón fueron sus hermanos y eso que el Conde de Salvatierra confesó que los había invitado. "Esperaba que viniese Carlos, la verdad, me hubiera hecho ilusión porque hace poco estuvimos en una misa por los cincuenta años de la muerte de nuestro padre, y estuvieron todos. Aquí no ha venido ninguno ningún año", aseguró.

El propio Cayetano Martínez de Irujo sostuvo que esta situación "es triste, porque me he esforzado mucho para que la familia esté unida". Y a las claras, no lo ha logrado ya que mantiene poco contacto con sus hermanos, sobre todo desde el fallecimiento de la Duquesa de Alba.

"La verdad es que no tengo mucho que decir. Que quede en su consciencia", explicó Cayetano Martínez de Irujo, después de explicar que "Fernando me llamó esta mañana y me dijo que estaba con gripe hace tres días", mientras que excusó a Alfonso Diez porque "está con Covid".

Sobre el final, el ahora productor agropecuario reflexionó que "la vida es corta. Hay que quererse y hay que ayudarse", en un mensaje para sus hermanos, con los que tan poco tiene en común en estos últimos tiempos.