La escandalosa diferencia que separa a Victoria Federica y Froilán del resto de sus primos

Las diferencias entre los primos Borbón han sido siempre muy marcadas, a pesar de lo que muchos pensarían. Todos son nietos del Rey Juan Carlos y nacieron en cunas de oro, con el futuro asegurado y con una vida por delante en la que no habría privaciones ni sacrificios. A menos que ellos lo desearan, claro.

Además de tener actualidades diferentes, los Borbón y Urdangarin se las ingenian al buscar sus espacios en el mundo de los estudios, el trabajo y el deporte, mientras que los Borbón y Marichalar hacen gala de su fortuna y sus gustos refinados.

Es así que vemos a Victoria Federica devenida en influencer mientras se pasea vestida con las mejores marcas y maneja un auto de alta gama. Lo mismo sucede con Froilán de Marichalar, su hermano, que mantiene las buenas costumbres familiares.

En el caso de la hija de la Infanta Elena, se la puede ver recurrentemente conduciendo un Audi Q3 35 TDi. Aunque se sospeche que pueda ser rentado, algunos de sus allegados sostiene que es de su propiedad.

Algo similar ocurre con Froilán de Marichalar, que se mueve por Madrid al mano de un Audi Q3 Sportback, que costaría al menos 900 euros por mes en una empresa de renting. 

A diferencia de Victoria Federica, que conduce un auto valuado en 40.000 euros, los tres hijos mayores de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin se mueven en un VW Golf GTE, que cuenta con un contrato de renting de tres años, obsequiado por el Rey Juan Carlos. 

Aunque no tienen que pagarlo todos los meses, los Borbón y Urdangarin se turnan para utilizar ese coche. No obstante, el único usuario cotidiano es Juan, ya que Miguel está radicado en Londres, Irene es menor de edad y Juan nunca mostró interés en siquiera sacar el carnet que lo habilite.