El nuevo escondite de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia en Vitoria, al descubierto

Las turbulencias generadas a comienzos de año por la publicación de las primeras fotos de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia parecen haber terminado hace tiempo para la pareja, que, además de hacer una vida alejada de las miradas indiscretas en Vitoria, también tiene un nuevo escondite en las afueras de la ciudad. 

Cuando a fines de enero la revista "Lecturas" publicó una tapa con Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia, todos los ojos viraron hacia una nueva infidelidad del todavía esposo de la Infanta Cristina. Tanto revuelo se armó que se montaron guardias en todos los lugares en donde solía pasar tiempo la abogada y su nueva ilusión. 

Fue por eso por lo que Iñaki Urdangarin abandonó el buffet de abogados en el que se conocieron y, desde ese momento, se mantiene en paro, situación que durante un tiempo lo desesperó, pero que, ahora, parece no moverle un pelo. 

Ya con la relación disuelta, aunque con el matrimonio todavía sin interrumpirse, el exyerno del Rey Juan Carlos ha apostado todo al noviazgo con Ainoha Armentia, quien está agradecida después de aguantarse los embates de la prensa rosa. 

En las últimas semanas, la flamante pareja que se muestra sin problemas por las calles de Vitoria ha sido vista en un nuevo refugio, en un paraje muy cerca del pueblo alavés de Zurbano. Cuentan algunos testigos que la mayoría de las veces van acompañados de algunos amigos y que, a pesar de no pertenecer al círculo de Zarzuela, todavía cuentan con escolta.

“Es normal que vayan allí en búsqueda de tranquilidad, yo también voy para desconectar un poco del ruido de Vitoria porque no hay casi gente. Además, los pueblos que hay alrededor son de chalets y casitas bajas, es gente de bien, que no está pendiente de estas cosas ”, le contó una fuente a "Vanitatis", que le ha seguido el rastro a Iñaki Urdangarin hasta que ha dado con él, a poco más de cinco kilómetros del lugar en donde vive con su madre.