ESCÁNDALO FAMILIAR
La traición de Manolo Santana que Alba Santana no puede perdonar
La heredera del tenista español ya no tolera más las polémicas.En tan solo seis meses, Alba Santana se quedó huérfana, luego del fallecimiento de sus padres, Mila Ximenéz y Manolo Santana, con quien mantenía vínculos completamente diferentes. A pesar de la tensa relación, la joven de 37 años se dejó ver visiblemente afectada por la pérdida de sus padres y, para salir adelante, se refugió en los brazos de su marido, Aviv Miron, y sus dos hijos, de 14 y 8 años.
Luego del fallecimiento de Mila Ximenéz, Alba Santana recibió tres millones de euros por parte de su progenitora, quien cosechó una gran fortuna gracias a su popularidad en la televisión. Pero, por parte de Manolo Santana, la joven no recibió ni recibirá parte de la herencia de la que tanto se habla.
Antes de morir, Manolo fundó múltiples sociedades y propiedades que lo catalogaron como uno de los hombres más adinerados del país. Pero, a pesar de su fortuna, le dio la espalda a sus herederos cuando ellos más lo necesitaban. "Mientras mi padre estaba entre nosotros hemos tenido dificultad para vernos pero le he querido muchísimo y ahora sé que está en paz", declaraba Alba Santana, quien viajó desde Holanda hasta la capital española para asistir a la capilla ardiente que se instaló en la Caja Mágica por su padre.
Por orden del exdeportista, ninguno de sus cinco hijos aparece en su sagrado testamento, porque su esposa se encargó de que él los desheredara a todos. A pesar de esta desafortunada decisión, sus herederos buscan recuperar objetos personales de su padre, para mantener su recuerdo vivo, a pesar de la negativa de Claudia Rodríguez, la viuda del tenista español.
Tras la partida de Manolo, Claudia Rodríguez heredó todo el patrimonio de su esposo fallecido y quedó a cargo de sus recuerdos materiales. Sin dudas, esto provocó el profundo malestar de los herederos del extenista español, Alba, Beatriz, Manuel, Bárbara y Borja, quienes le enviaron una petición a la viuda para reclamar los objetos de su progenitor.
Por otra parte, Claudia también quedó a cargo del club de tenis donde Manolo Santana se desempeñaba como presidente. "El club no pasa por sus mejores momentos, necesitaría hacer una gran reforma, pero Claudia no tiene intención de gastarse el dinero que modernizaría las instalaciones. Su marido era el reclamo perfecto para atraer socios", aseguraba un empleado del lugar sobre la viuda del tenista español, quien termina su mandato en 2026 y no tiene la idea de renovarlo.