La inmensa decepción que hundiría aún más el corazón de la Infanta Cristina

No están siendo días muy bonitos para la Infanta Cristina. Desde que “Lecturas” publicó las fotos de Iñaki Urdangarin, su entonces esposo, con su amante Ainhoa Armentia, la cuestión se desmoronó a pedazos. Basta de fingir, allí no hay amor hace tiempo.

Lo sospechábamos, pero como Iñaki Urdangarin necesitaba tener registrado un sitio de residencia familiar, pensábamos que lo suyo con la Infanta Cristina seguía funcionando. Ya causaba mucho ruido el hecho de que no hayan celebrado su aniversario de bodas.

El motivo llegó y es que Iñaki Urdangarin prefería estar con su compañera de trabajo antes que con la Infanta Cristina. Desde la Casa Real dijeron que pondrían en pausa su relación, aunque entre líneas sabemos que se refiere a un inminente divorcio.

Según la periodista Pilar Eyre, Cristina de Borbón estaría dejando en manos de profesionales este asunto. La palabra separación está, aunque lo que suena más entre líneas es la definición de divorcio. De todos modos, hay una sola causa que hizo verter lágrimas en el rostro de la Infanta.

Según la experta en realeza, la Infanta Cristina habría llorado cuando Pablo Urdangarin, su hijo, dijo que sí conocería a Ainhoa Armentia. Lo arrojó al pasar en un reportaje con gestos de que no le importa demasiado la situación. Sin embargo, causó una herida en su madre.

La situación está muy sensible. Lo único seguro es que la Infanta Cristina no estaría dispuesta a perdonar a Iñaki Urdangarin. Quedó más que claro que el exduque de Palma prefiere no esconder su amor con su compañera de trabajo. Será el turno de la hija del Rey Juan Carlos de dar vuelta la página. Si sus hijos quieren conocer a la nueva ilusión romántica de su padre, tampoco lo podrá impedir.