PENDE DE UN HILO
El límite con el que juega Jaime de Marichalar para sacar de las casillas a la Infanta Elena
La poca cordialidad que había entre ambos puede pasar a la historia.
Hay un fino límite que divide la cordialidad de la tormenta y Jaime de Marichalar últimamente pone a prueba esa línea con la Infanta Elena. La causa sería nada más y nada menos que Victoria Federica, la nueva revelación de la moda y el dolor de cabeza de los protocolos reales.
La nueva faceta de influencer y chica fashionista de Victoria Federica no ha sentado nada en gracia a la Infanta Elena, quien esperaba otras cosas de su benjamina. La manda a las mejores Universidades, goza del privilegio que casi ningún mortal posee al ser de la realeza española, pero no. La joven rebelde decide ir tras los pasos de su padre.
Jaime de Marichalar es un empresario de la más alta alcurnia. Forma parte de una de las firmas más exclusivas del globo en materia de moda y no ha dudado en cumplir los caprichitos de su hija. Si Victoria Federica quiere ser modelo, sus deseos son órdenes.
No piensa lo mismo la Infanta Elena. De hecho, recordemos lo que reveló Pilar Eyre hace un tiempo, cuando sus hijos se paseaban de disco en disco sin usar mascarilla y el Rey Felipe tuvo que regañar a su hermana. El legado que el legítimo heredero del trono intenta reflejar con su mandato es borrado con el codo de su sobrina.
El ex Duque de Lugo (de "Lujo" para algunos) se apartó de la familia real hace tiempo. Al igual que Iñaki Urdangarin, buscó su camino y lo encontró rápidamente y al no estar más vinculado a la Familia Real, tendría vía libre para hacer lo que quisiese.
Aunque no cabe duda que Jaime de Marichalar reapareció en la escena pública por la puerta grande y ha ingresado al desfile de moda más importante del mundo en la ciudad del amor, Paris, escoltado por Victoria Federica, lo cual indica la nueva era en su vida.
Pero Jaime de Marichalar no está solo, cuenta con un gran aliado para impulsar la carrera de Victoria Federica. Jorge Bárcenas es la pareja de la influencer, quien también goza de una amplia popularidad. Todos apuntan a impulsar a la joven a realizar sus sueños, todos menos su madre Elena de Borbón. Los protocolos reales todavía pesan sobre sus hombros.
