El último error por el que Iñaki Urdangarin pagaría un precio muy alto

Por más que Iñaki Urdangarin hace todo lo posible por esquivar a los medios de comunicación, los detalles sobre su nueva vida trascienden de igual manera. Uno de los menos esperados era la visita de Ainhoa Armentia a la casa de su madre, Claire Liebaert, una información por la que se ha pronunciado días más tarde. Después de obtener la libertad condicional, la alegría de la familia es indiscutible.

Sin embargo, el exdeportista pasó de la felicidad al enfado en poco tiempo al ver la presión mediática en la que se encuentra y que terminó por afectar a su progenitora, por lo que dio un paso al frente y fijó límites claros para proteger a la mujer que le dio la vida. Desde "El Programa de Ana Rosa", dieron a conocer el incómodo momento que vivió el exDuque de Palma ante las cámaras.

Todo se dio cuando Claire, la madre de Iñaki Urdangarin, salió a hacer unas compras y la reportera del mencionado programa llegó para preguntarle sobre las últimas informaciones, entre las que destacaba si había conocido a Ainhoa Armentia, algo que negó de forma rotunda: "No la conozco para nada, no vino a mi casa, nadie la conoce". 

Pero todo no quedó allí, cuando entró a la tienda a hacer la compra, al notar tanta presencia de reporteros llamó a los escoltas, quienes no llegaron solos al lugar, también el todavía esposo de la Infanta Cristina llegó, y tomó de la mano a su madre, tras sentenciar a los periodistas con una determinante frase.

Está sola mi madre, qué falta de respeto.

Iñaki Urdangarin está cansado del seguimiento y también de las constantes preguntas sobre su futuro personal y laboral; ya no puede más, por lo que intenta trazar una línea con el firme propósito que los trabajadores de la comunicación no la pasen. Aunque es difícil saber que lo logrará, en la actualidad es uno de los personajes de interés mediático más buscados.

Unos días le vienen bien y otros le afecta, más que todo cuando el exjugador de balonmano no quiere que su situación se complique aún más, pero cada paso que da, siempre se acerca más a la polémica, en vez de alejarse.