Charlène de Mónaco pierde a su mejor aliada, Chantell Wittstock, tras su regreso

Según fuentes oficiales, durante la estancia de Charlène de Mónaco en Sudáfrica, una pieza fundamental en su recuperación fue la de poder contar con el apoyo incondicional de su discreta cuñada, Chantell Wittstock, esposa de Sean Wittstock.

No obstante, con el regreso de Su Alteza Serenísima al Palacio Principesco de Mónaco, la prensa rosa especula con la idea que pierde a su mejor aliada, pues durante casi un año, la tía de Gabriela y Jaime de Mónaco asistió en todo momento a la Princesa.

En cuanto la salud se lo permita, la Princesa podrá disfrutar de la alegría de convivir con los monegascos, algo que tanto ha echado de menos.

Estas son algunas de las líneas que se alcanzan a leer en el comunicado oficial lanzado por la Casa de Grimaldi hace unos días, cuando decidió anunciar por todo lo alto la vuelta de la esposa del Príncipe Alberto a casa.

Si bien la Casa Real Monegasca indicó que la Marquesa de Baux está "muy feliz" de reencontrarse con su familia, esposo e hijos, adelantó que no tardará su reincorporación pública en alusión a los compromisos institucionales.

En las próximas semanas podrá retomar completamente sus actividades oficiales.

A raíz de esto, diversos portales digitales se mojaron con respecto a la delicada salud de la hija de Michael Kenneth Wittstock y, en efecto, consideran que no sería bueno y prudente ponerla tan pronto en el foco mediático tras no contar con la ayuda de alguien como Chantell Wittstock.

Con respecto a esto último, la cuñada de Charlène de Mónaco no solo fue su amiga y confidente durante todos estos meses de ausencia, sino también una de las grandes defensoras de la Princesa Consorte en sus horas más bajas. Le tendió una mano en el proceso de recuperación, la acogió en su hogar y no le tembló la voz para salir a desmentir los falsos rumores creados por los periódicos más amarillistas.