NO HAY VUELTA ATRÁS
La persona que Ainhoa Armentia habría herido para vivir su romance con Iñaki Urdangarin
Esto traerá consecuencias graves de aquí en más.
Ya no se esconde. Son los “Marta Riesco y Antonio David Flores” pero de la realeza. Iñaki Urdangarín y Ainhoa Armentia ni se esfuerzan por ocultarse de la mirada pública. Una vez estallada la bomba queda solo seguir para adelante, esta vez dejando atrás el pasado.
Pero, en ese pasado hay personas, vidas, familias enteras que también sufrirán las consecuencias de este romance. Por ejemplo, el esposo de Ainhoa Armentia, quien al igual que la Infanta Cristina se enteró por las revistas que su compañera de vida tenía un romance con el exduque de Palma.
Lo confirmó Alessandro Lequio en “El programa de Ana Rosa”. Sus palabras fueron las siguientes: “Por cierto, me cuentan que el pobre marido de Ainhoa Armentia está destrozado y puede que esté viviendo una situación de cachondeo por parte de algunos compañeros de trabajo".
A este comentario reaccionó rápidamente Joaquín Prat, que dijo: "eso es una cabronada y de ser mala gente", "E innecesario, porque la gente se separa" añadió Bibiana Fernández. No solo es la Infanta Cristina quien está viviendo estos destellos en su matrimonio.
Hay quienes creen que la relación de Iñaki Urdangarín con Ainhoa Armentia es solo pasajera, algo que no pasará a mayores. Sin embargo, hay quienes piensan que en realidad es un paso definitivo. Este idilio es el boleto de salida sin retorno del exbalonmano de la realeza.
Si uno sale, entonces quiere decir que otro entra. Y si, por consecuencia, hablamos del regreso de la Infanta Cristina a la familia royal. Bien sabemos que fue Iñaki Urdangarín el que la apartó de la Corona. Su hermano y su padre le insistieron en que se divorcie allá por 2018, cuando estalló el escándalo de la Causa Noós. Dijo que no. Hoy la situación es diferente.
En ese sentido, Ainhoa Armentia no tiene nada que perder, aunque, según lo revelado por Lequio, su esposo es quien amortigua todas las consecuencias. No es para menos, pues un romance clandestino siempre traerá consecuencias, a no ser que el pacto de ambas parejas sea de una relación abierta. Pero, en este caso, ponemos en duda esa opción.
