SOLO EL BLANCO DEL OJO

El desafío que la Reina Sofía tuvo que enfrentar casi a la misma edad que la Princesa Leonor

Con la salvedad de que ahora la futura heredera tiene un panorama diferente.
jueves, 31 de marzo de 2022 · 11:58

La única biografía que la Reina Sofía aprobó sobre ella es la escrita por Pilar Urbano. Allí describe un de los episodios que más marcaron su vida que, casualmente, coincide en edad con la Princesa Leonor. Pero la diferencia entre ambas es abismal, pues mientras una sentía el deber sobre sus hombros y la impulsó a actuar, la otra permanece aniñada en un mundo de adultos siendo ajena y hermética ante lo que sucede.

La pandemia del coronavirus será algo que nos acompañará para lo que quede de historia. El año 2020 marcó al mundo entero dejando daños irreparables al día de hoy. Fue la oportunidad perfecta para que la Princesa Leonor emita su primer discurso, uno bastante intervenido por un lenguaje adulto siendo que el mensaje iba dedicado a los jovenes como ella.

La forma en cómo se aniña a la Princesa Leonor habla mucho de la Corona. No es una persona espontánea ni se la nota cómoda con el rol que debe ejercer. Rodeada de protocolos y de una vida adulta moldeada, cumple como puede su deber con la escasa empatía que tiene. Tan distinta fue Doña Sofía a su edad, quien no dudó en viajar hasta Grecia para ayudar a quienes lo necesitaban poniendo el cuerpo y enfrentando las críticas.

A meses de haberse casado con el Rey Juan Carlos, la Reina Sofía lo acompañó a asistir a las personas de la comarca de Vallés que habían sufrido una terrible inundación, dejando un saldo de 1000 muertos. Ese fue uno de los gestos que convencieron a los españoles de que esta Reina extranjera quería tanto al país como cualquier otro ciudadano nativo.

Pero este episodio estuvo presidido por otro, donde la Reina Sofía también demostró su compromiso, esta vez con las personas de su mismo país de nacimiento. Fue en 1953, cuando apenas tenía 16 años, un terremoto sacudió las islas Jorndánicas, causando la muerte instantánea de cientos de griegos. Sofía de Grecia no dudó en subirse al primer barco y acudir al rescate de su pueblo.

La Reina Sofía se caracterizó siempre por su sentido de solidaridad. 

No estaba sola. Su padre Pablo I y Federica de Grecia fueron en el mismo dragaminas a recorrer las zonas afectadas. En ese momento se hablaba si la presencia de la Reina Sofía obstruía el paso o facilitaba las cosas. Nunca le importó, pues su deber estaba primero y ella deseaba estar junto a los suyos quebrando un poco el protocolo.

“Mi padre se propuso devolver el ánimo a ese pope, y convencerle de que allí, en Zante, con aquellos supervivientes desquiciados por la pena y el horror, que habían perdido sus casas y sus seres queridos, allí estaba su misión, allí estaba su deber”, señaló la Reina Sofía en su momento a Pilar Urbano. Claramente hablamos de una situación diferente que la que vivió la Princesa Leonor, pero aún así no deja de asombrar el increíble paralelismo.