CUESTIÓN DE PIEL

El gesto que terminó de sentenciar la relación de la Reina Letizia y la Reina Sofía

Suegra y nuera, una eterna riña que nunca tendrá su final feliz.
jueves, 31 de marzo de 2022 · 12:08

Quedó para la historia aquella icónica salida de la Catedral cuando la Reina Sofía quiso tomarse una fotografía con sus nietas y la Reina Letizia, cual leona protectora, se impuso entre ella y los fotógrafos. La Consorte evidenciaba así su profundo descontento con su suegra, quien responde en afecto de la misma forma.

Es una cuestión de piel. La Reina Letizia y la Reina Sofía no se soportan y hay incluso quienes dicen que esto es así desde el día uno. Cuando Felipe VI presentó a su prometida, una mujer proveniente de clase trabajadora, no sentó bien a varios miembros de la familia, incluida Marie-Chantal de Grecia, sobrina de la Emérita.

Silvia Taulés explicó para “Vanitatis” cómo es la relación entre suegra y nuera, algo bastante tenso que se mantiene al día de hoy. La periodista informa que las visitas del Rey Felipe a su madre suelen ser muy frecuentes y que acude muy bien acompañado. Es la Infanta Sofía quien va todas las semanas a darle el reporte a su abuelita.

“Felipe VI y la reina Sofía se ven casi a diario en el recinto de Zarzuela, donde ambos viven en casas diferentes" explica Taulés manifestando que hay un contacto estrecho entre ambas partes. Solo que con la Reina Letizia la situación se distancia un poco. No acompaña a su esposo a la casa de su madre y, por otro lado, tampoco Sofía de Grecia va hacia donde vive su hijo.

La Reina Letizia y la Reina Sofía nunca se llevaron bien. 

Quien sí pisa muy a menudo la residencia de la Reina Letizia es Paloma Rocasolano, su madre. Una abuela está completamente invitada y la otra no, gesto que llamó la atención de los críticos, quienes esperan que algún día las diferencias se disipen. Pues que esperen sentados, porque solo un milagro podrá juntar al agua y al aceite en una misma gota.

Hoy los Reyes partieron a Londres al funeral del Duque de Edimburgo, evento que contó con la presencia de la archienemiga de Letizia, Marie-Chantal de Grecia. Voceros dicen que ni se dirigieron la palabra. El resentimiento entre ambas es mutuo, pues fue la sobrina de Doña Sofía quien manifestó su descontento por ese gesto en la Catedral de Madrid. No hay piel por más que insistan. La Reina Letizia camina con zapatos diferentes a los de su suegra y sus parientes.