Polémico

El capricho de la Reina Letizia y el Rey Felipe que marcó la vida de la Princesa Leonor

La Reina Sofía nunca se los perdonó.
domingo, 6 de marzo de 2022 · 12:29

Hace pocas horas se pudo conocer que la Reina Sofía y la Reina Letizia, por fin e inesperadamente, coincidirán en algo: pausar sus compromisos marcados en rojo en la agenda real para hacer honor al Día Internacional de la Mujer, el próximo miércoles 8 de marzo. No obstante, como ya es de público conocimiento, la relación suegra y nuera no sería de la más llevadera y, sin duda, el Rey Felipe y la Princesa Leonor fueron los más perjudicados de esta situación.

La Familia Real constantemente está vinculada a escándalos mediáticos.

Mucho más ahora con la nueva información que trascendió en los medios de comunicación. Es un secreto a voces que la Reina Sofía y la Reina Letizia no son el ejemplo de un maravilloso vínculo familiar, de hecho, en reiteradas oportunidades el público fue testigo de los desaires y feos que la Consorte le hizo a la Emérita, pues siempre hay cámaras periodísticas que captan esos momentos que quedarán para la historia de los Borbones.

Esta larga lista de descortesías por parte de la esposa del Rey Felipe ya tiene larga data. En efecto, esto, tal vez, sea lo que marcó un antes y un después en la Familia Real. De acuerdo a lo reportado por Jaime Peñafiel en una de sus columnas publicada por el portal LOC la Reina Sofía jamás podría perdonar la actitud que tuvo la Reina Letizia cuando nació la Princesa Leonor.

Ahora se ha sabido que Leonor iba a llamarse Sofía, pero Letizia no quería saber nada de que su primogénita llevara el nombre de su suegra. Ya apuntaba malas maneras.

El especialista en Realeza se encargó de resaltar que era el sueño del Rey Felipe que su hija llevara la gracia de su madre. Sin embargo, debido a la gran influencia que habría ejercido la Reina Letizia el anhelo del Monarca no pudo ser posible hasta que nació su segunda heredera: la Infanta Sofía.

Cabe destacar que para Jaime Peñafiel la Reina Letizia siempre fue la encargada de generar malestar entre los miembros de la Casa Real, en especial entre el Rey Felipe y el Rey Emérito. El escritor la califica como la mayor instigadora dentro de la Realeza que solo tiene un único objetivo: separar a los Borbones.