La Reina Sofía desafía a toda su familia con un sólido gesto

El panorama familiar en la Corona se ha tornado en los últimos días muy tenso, y es que la celebración de la Semana Santa ha sido atípica para todos y las tradiciones que unían a los integrantes de la Corona por estos días parecen haberse roto para siempre.

Mientras las Infantas Elena y Cristina se encuentran en Emiratos Árabes con sus hijos acompañando al Rey Juan Carlos, y los Reyes Felipe y Letizia parecen estar disfrutando de estos días libres en total privacidad, la Reina Sofía ha querido mantener las tradiciones religiosas intactas y ha participado en la agenda previa a la tradicional Misa de Pascua que se celebra este domingo en la isla.

Este Jueves Santo se observó a la Emérita disfrutar junto a su hermana Irene de Grecia de la procesiones de Palma, la Monarca no ha podido perderse el paso del Crist de la Sang en la capital de la isla, un gesto con el que estaría desafiando a toda su familia.

La Reina Sofía ha sido fiel a sus costumbres y, como tal, ha sido la única que este año no se ha perdido su cita con la ciudad de Palma. Sin importar la distancia del resto de sus familiares, la madre del Rey Felipe ha sido testigo un año más de las tradicionales procesiones que volvían de nuevo a la isla tras dos años paralizadas por la alerta sanitaria desencadenada por la Covid-19.

Si bien la Reina Sofía siempre se ha desvivido por sus hijos y nietos, en esta oportunidad parece estar concentrada en mantener intacta su fe y no dar mayor lugar a la polémica que pudiera generar sus gestos.

Varias señales de televisión regional transmitieron imágenes de cómo la Reina y su hermana Irene de Grecia veían la procesión sentadas en primera fila rodeadas por los vecinos de la ciudad que se acercaron al lugar, luego, tras ver los pasos por este punto, se trasladaron a la plaza Juan Carlos I, conocida como “Las Tortugas”, un espacio que había sido de especial importancia para la familia en años anteriores.