La transparencia que no alcanzaría para justificar a la Reina Letizia

A fines del pasado mes de abril el Rey Felipe presentó públicamente la declaración de su patrimonio, un gesto que viene cumpliendo a rajatabla desde que se propuso restaurar la transparencia y la confianza de la monarquía. Eso sí, la Reina Letizia no tiene deberes constitucionales, por lo que está exenta de presentar todo tipo de cuentas. Lo que desde este lugar nos preguntamos es lo siguiente: ¿Por qué la Consorte no puede tener el mismo gesto que el Rey? ¿Qué pagamos los españoles a Su Majestad?

Por ser un descendiente de la corona, el Rey Felipe percibe un ingreso de casi 2.6 millones de euros, de los cuales 2.5 pertenecen a ahorros e inversiones y el resto a una tasación por joyas y antigüedades de firma Borbón. Todo esto ha repercutido en los medios, ya que claramente el Rey gasta mucho menos por tener muchos ítems pagos, además de las inversiones con alta rentabilidad que ha tenido los últimos años.

De la Reina Letizia Nino, (ni noticias) hasta ahora. Al no estar obligada a presentar su declaración, nos vemos obligados a dedicar a ciencia inexacta cuánto vale, por ejemplo, su amplio vestidor o el maquillaje que usa para cada evento, gastos de peluquería y la incalculable cantidad de zapatos que ornamentan sus looks.

Claro que muchas marcas mueren por vestir a la Reina. Es una tradición que con los años cobró cada vez más prestigio. Firmas españolas llevan sus propuestas a Su Majestad y su selectivo grupo de estilistas decide qué llevará Doña Letizia en cada ocasión.

Cómo se adquieren esos trajes que usa la Reina Letizia, adónde van a parar una vez hecho el estreno, en qué concepto entran en el presupuesto de la Casa Real y cuál es finalmente el destino de las prendas con el paso del tiempo, es algo que todavía carece de “transparencia”. No se presentan cuentas al respecto, aunque el resultado esté a la vista.

El medio “Informalia” estableció una curiosa comparación, pues es cierto que un túnel gris no permite comprender con claridad adónde van a parar tantos trajes y cómo costea la Casa Real esos gastos, pero también es cierto que la Reina Letizia mantiene una agenda muy completa, personalizada y que excede el territorio español. Sin ir más lejos, el próximo 1,2 y 3 de junio viajará a África nuevamente. Hablamos de ciertos recursos que nuestra representante debe contar para llevar alto la imagen de España.

La Monarquía está en crisis y siempre es desde esta frase donde partimos nuestro análisis. El ejercicio de transparencia que intenta profetizar el Rey Felipe huele a buena intención, pero al no llegar a la Reina Letizia carece de base sólida. Todo lo que respecta a moda y cuidado personal, todavía espera su aclaración.