Las fotos capaces de terminar con la paciencia de la Reina Letizia

La Reina Letizia es a veces considerada como una madre muy estricta, capaz de poner límites excesivos a la Princesa Leonor o a la Infanta Sofía. Los críticos la han tildado de exagerada en sus ademanes, ante la vista de todo el público, en remarcar cada falla por más minúscula que sea.

Pero lo que nunca podrán decir de la Reina Letizia, es que ha tenido hijas capaces de comportarse como lo ha hecho el Príncipe Louis de Inglaterra durante el Jubileo de la Reina Isabel. Un niño que ha sacado de las casillas a su madre Kate Middleton, quien ha sido muy cuestionada por la prensa británica.

Moriquetas, burlas, lenguas afuera, rabietas, pataleos y gritos han sido la constante de quien algún día, con educación estricta, será el Rey de Inglaterra. Son imágenes que basta con verlas, para imaginar la cara que pondría la Reina Letizia si sucediera con sus niñas.

Es cierto que Letizia ha impuesto en sus hijas horarios estrictos, dietas rígidas en dulces y chucherías que tanto gustan a los niños, restricción de redes sociales y una educación de excelencia por sobre todas las cosas. Pero el resultado son dos jóvenes a las que no se les conoce un berrinche ni una situación como la vivida en las narices de la Reina Isabel.

Ni siquiera cuando las hijas de la Reina Letizia tenían 4 años, la edad del pequeño protagonista del Jubileo, han sido así, tal como consigna el Daily Mail. El príncipe Louis incluso puso a prueba la paciencia de su madre, Kate Middleton, a quien le tapó la boca y le hizo burla. Consultada al respecto, Jo Frost, la 'Supernanny' de Reino Unido, le ha querido bajar el tono.

La mayoría de los niños no se pueden sentar en la mesa del comedor más de quince minutos seguidos. Los niños van probando sus límites y eso es lo que se debe esperar. 

Siempre correctas, educadas, centradas, conformes a la situación que vivían, respetuosas de las formas de expresión, lo cierto es que Letizia ha criado a dos buenas hijas. Buena parte de ello, a diferencia de Kate Middleton, es que no ha dejado en niñeras el mando de la situación. Las consecuencias están a la vista.