El periplo más trágico del Rey Juan Carlos y la Reina Sofía en lo que se suponía sería de ensueño

Como la mayoría sabe, el Rey Juan Carlos y la Reina Sofía celebraron el pasado mes de mayo 60 años de casados, más precisamente el día 14, por lo que la prensa rosa ahondó en detalles imperdibles de la boda que tuvo lugar en Atenas.

De momento, te contamos que la revista "Mujer Hoy" recordó el periplo más trágico de los padres del Rey Felipe en lo que se suponía sería de ensueño, dado que tuvieron una trastabillada luna de miel que duró casi seis meses.

Los recién casados, Don Juan Carlos y Doña Sofía, estuvieron visitando diferentes ciudades alrededor del mundo durante seis meses.

Tras estas palabras, el medio citado explicó que este largo viaje fue un regalo de bodas de los armadores griegos Stavros Niarchos y Aristóteles Onassis, quienes eran amigos de la Familia Real Griega y rivales de la española. "Comenzó en la lujosa suite del Creole, el velero de los años veinte de 63 metros, considerado uno de los más hermosos del mundo", expresó el ejemplar desvelando que era propiedad del primero.

Lejos de ser un recuerdo inolvidable para los Reyes Eméritos, el magacín aseguró que "no hubo romanticismo" en su primera noche a solas como marido y mujer. ¿La razón de esto último? Sofía de Grecia tenía que cuidar del brazo de su marido porque lo tenía escayolado.

La joven novia tuvo que ejercer de enfermera, además de esposa, porque días antes de la boda Don Juan Carlos se había roto la clavícula izquierda practicando kárate y judo con su cuñado Constantino de Grecia.

De esta manera, el periódico en cuestión deja entrever que la luna de miel del Rey Juan Carlos y la Reina Sofía había iniciado con el pie izquierdo - bueno con el brazo en el caso del monarca-, por lo que su noche de bodas no fue la soñada. De inmediato, el sitio web remarcó que debido al esfuerzo del soberano, en su gran día, las cosas se complicaron: "El yeso se le había pegado a la piel y la llevaba en carne viva".

Sofía, formada como puericultora, tuvo que ir arrancándoselo poco a poco del brazo. Parece que no hubo tiempo para lo que la madre de Sofía, la Reina Federica, llamaba 'hacer dinastía'.