INÉDITO
La infanta Elena y la Infanta Cristina coinciden vestidas de fiesta
Las royals no se perdieron este importante evento.
Después de 30 años en donde Mallorca no era escenario de una boda real, antes había sido con el príncipe Kyril de Bulgaria y la consultora de arte Rosario Nadal, ahora se vistió de fiesta protocolar para el enlace entre Mafalda Sajonia-Coburgo-Gotha, con el financiero de origen libanés Marc Abousleiman, la que se robó todas las miradas más allá de la novia fue también la Infanta Elena.
La revista "Hola" fue la encargada de publicar en exclusiva todas las postales del enlace, la novia tiene veintisiete años, se decantó por la campiña de la isla balear, allí veranea desde pequeña y el lugar elegido fue la finca ‘Son Pons de Cardaix’, ubicada en Llucmajor, al este de Palma. La cantante deslumbró con un vestido vintage de Valentino que había pertenecido a su madre y se respetó que no se filtraran imágenes.
No asistieron demasiados protagonistas pero sí contaron con la presencia de varios royals teniendo en cuenta el origen de los novios. La Infanta Cristina y la Infanta Elena estuvieron presentes también y, como es notable en esta clase de eventos, sus looks también dieron de qué hablar.
La Infanta Cristina, que es buena amiga de Kyril y Rosario, fue una presencia que causó gran revuelo. La hermana del Rey Felipe volvió a pisar La Palma después de varios años de ausencia, su ducado había terminado en 2015, se presentó junto a su hijo Miguel Urdangarin y a su hermana.
La Infanta Elena, por su parte, acompañando también a la Infanta Cristina, optó por un estilismo de lunares muy español, ambas completamente acordes a la ocasión. Después tenemos entre las figuras de róyals a la princesa Alia de Jordania, exmujer del príncipe Faisal, hijo del desaparecido Rey Hussein I y hermano del actual Rey Abdalá de Jordania.
Por el momento no se conocen muchas más imágenes del enlace que contó con la presencia de la Infanta Elena y la Infanta Cristina, solo las que se captaron desde afuera de la celebración, los novios han preferido que todo el evento sea a puertas cerradas y quede en la memoria solo de los invitados.
