REINA ISABEL
El Rey Juan Carlos complica como nunca antes a la Reina Isabel
El monarca español complica su existencia.
Diez reyes de España han sido nombrados caballeros de la Orden de la Jarretera en la historia. Todos entre 1450 y 2019. El Rey Felipe fue el último de todos ellos. Considerado un obsequio de los Reyes de Reino Unido a los miembros destacados de la Realeza europea, la Reina Isabel jamás pensó que se arrepentiría tanto de su decisión, la de otorgar este honor al Rey Juan Carlos de España.
El padre de Felipe VI ingresó a la prestigiosa orden allá por 1989. Con más de treinta años de membresía, fueron los últimos años de Juan Carlos I los que han llevado a Isabel II a enfrentar lo que sería uno de sus grandes dilemas del último tiempo. Y ha tenido muchos, pero, como este, muy pocos.
El primero de los reyes en recibir el obsequio de la Corona británica fue Alfonso V de Aragón y de Nápoles (1450), después lo hicieron Fernando el Católico; Felipe I ‘El Hermoso’, Carlos I, Felipe II, Fernando VII, Alfonso XII y Alfonso XIII. Felipe VI lo hizo en 2019 con el beneplácito de la mismísima Reina Isabel.
De la Orden de la Jarretera forman parte royals como el intachable Rey Guillermo de Holanda, quien ingresó casi en simultáneo con el Rey Felipe. Los pecados financieros del Rey Juan Carlos, que lo llevaron a abdicar en favor de su hijo, que luego lo condenó al destierro en Abu Dabi, son los que estarían haciendo que la Reina Isabel se replantee su permanencia.
Si bien es poco probable que la Reina Isabel tome una determinación cruda con su par español, según lo que apunta la experta Marlene Koenig, consultada por “OKdiario”, hay antecedentes de miembros de la orden que han sido expulsados por distintos motivos.
En 1915, durante la Primera Guerra Mundial, se expulsó a Francisco José de Austria, a Guillermo de Alemania, a Enrique de Prusia, al duque de Cumberland, al Gran Duque Ernesto de Hesse, el Duque de Sajonia Coburgo y Gotha y al Rey Guillermo II de Würtenberg. Años más tarde, se hizo lo propio con Víctor Manuel III de Italia y de Hirohito, en 1941, aunque este último recuperó su estatus en 1971.
Otros casos más resonantes todavía fue el retiro de la membresía por parte del Rey Jorge V a su primo, Carlos Eduardo, duque de Sajonia-Coburgo Gotha y al duque de Cumberland que en el año 1917 perdieron títulos y reconocimientos a raíz de la Ley de Privación de títulos. Antecedentes de los que bien podría valerse Isabel II, si así lo quisiera.
¿Acaso el Rey Juan Carlos está a punto de experimentar un nuevo castigo por su pasado? ¿Se animará a tomar la decisión la Reina Isabel? Solo queda esperar.
