El beso de la Infanta Elena con otro hombre que nos deja con la boca abierta

Las hermanas del Rey Felipe han dejado atrás los años más tristes, los que las han tenido en las sombras, postergadas, sin permitirse vivir las cosas bonitas de la vida, con fracasos amorosos y un confinamiento cargado de feos momentos vividos junto a Don Juan Carlos. Todo eso parece haber quedado atrás, ahora la Infanta Cristina y la Infanta Elena viven su mejor momento.

Mientras Cristina ha dejado atrás a Iñaki, pero quien nos asombra y deslumbra con su encanto y desfachatez es la mismísima Infanta Elena, quien ha brillado con luz propia en la boda de Mafalda de Bulgaria junto a su hermana. Ahora, ha regresado a España con toda la energía dispuesta a llevarse el mundo por delante a sus 58 años.

Una muestra de ello es que la hermana mayor de Felipe ha vivido días imborrables, en los cuales ha sido capaz de recuperar su verdadera pasión: los caballos. Y mientras ha dado muestra de que como amazona posee un talento que no cede ante el paso del tiempo, también hubo espacio para mucho cariño, afecto, reencuentros con viejos conocidos y un beso que nos ha dejado con la boca abierta.

Todo ha sucedido cuando la Infanta Elena se tomó un receso de sus destrezas hípicas en el Club de Campo Villa de Madrid, que acoge desde este viernes y hasta el próximo domingo una de las citas más esperadas del circuito ecuestre: la Copa de Naciones, enmarcada dentro de la Longines EEF Series Nations Cups. 

Fue en este contexto de ensueño donde Elena de Borbón y Grecia se ha dejado ver más que cercana a Cayetano Martínez de Irujo, quien también se han subido a lomo de sus caballo para competir.

Lo que nos ha dejado a todos estupefactos, tal como lo muestran las imágenes de ¡Hola!, ha sido el beso muy cercano que se han dado apenas se han visto. Las sonrisas de la Infanta Elena y Cayetano ante los espectadores, no han hecho más que comentar el cálido momento registrado y seguido por un gran abrazo que, después de su breve romance en secreto hace años, han destapado rumores de una máxima: "Donde hubo fuego, cenizas quedan".