IRENE URDANGARIN

Irene Urdangarin, Rafael Nadal y la coincidencia menos pensada

La hija de la Infanta Cristina cumplió años.
lunes, 6 de junio de 2022 · 08:22

Irene Urdangarin es –como a muchos allegadas a la Casa Real les encanta decir- la hija deseada de la Infanta Cristina y de Iñaki Urdangarin. La menor de todos sus hijos, una de las seis Grandes de España y novena en la línea de sucesión. Pero, quizá, el título más preciado para la joven que este domingo festejó 17 primaveras es el de ser la nieta preferida de la Reina Sofía.

Prueba de esto último tiene que ver con la historia de la curiosa coincidencia que une a la joven royal con el tenista español Rafael Nadal. Un domingo 5 de junio especial para ambos. En 2005, año en que el de Mallorca comenzaba a hacer historia, Irene llegaba al mundo para escribir la suya. Y allí en Paris se encontraban sus abuelos para atestiguar el comienzo de una leyenda en Paris. El Rey Juan Carlos y la Reina Sofía estaban en primera fila cuando alguien les avisó el oído que su sexta nieta venía en camino.

Lo que pasó inmediatamente después es lo que muchos dicen es la prueba fiel de la gran afinidad que existe entre nieta y abuela. Ese día en que Nadal vencía al argentino Mariano Puerta por 6-7, 6-3, 6-1, 7-5, y se convertía en el jugador más joven en ganar Roland Garros, el Emérito no quiso moverse de su asiento por nada ni nadie. Quien sí lo hizo fue Doña Sofía, quien no quiso perderse ningún detalle de la llegada de quien hoy es dueña de una gran parte de su corazón.

La historia de Irene y de Rafa comenzó a escribirse un domingo 5 de junio idéntico al de ayer. Y esa sí que es una gran coincidencia.

Irene vivió muy poco tiempo en España, su país natal. Lo hizo en Barcelona y durante apenas cinco años. En 2009 se mudó junto a sus padres y sus tres hermanos (Juan, Pablo y Miguel) a Washington, Estados Unidos. Allí permanecería hasta 2012, un año después de que estallara el escándalo judicial que llevaría a prisión a su padre, Iñaki Urdangarin, en junio de 2018. Esto marcó el final de un matrimonio que aguantó como pudo hasta hace pocos meses. Muchos creen que lo hicieron para las cámaras, aunque es imposible determinarlo.

Lo único cierto es que el desenlace judicial llevó a que Irene y su madre, la Infanta Cristina, se unieran como nunca. Ambas se mudaron a Suiza, donde estudia aplicadamente hasta el día de hoy. En ese país ha podido desenvolverse y crecer lejos de los flashes de paparazis, un lujo que el resto de sus primos, como su preciada Victoria Federica, no han podido disfrutar.

Su misteriosa relación con la Princesa Leonor

Irene y la primogénita del Rey Felipe y de la Reina Letizia tienen la misma edad. Sin embargo, no se puede decir que comparten una gran afinidad, como sí ocurre entre la hija de la Infanta Cristina y su prima cinco años mayor, Victoria Federica.

A pesar de la ruptura que han planteado los Reyes de España con la familia Urdangarin por el caso Nóos, hay quienes aseguran que la relación entre primos se ha mantenido intacta.

Sin embargo, y como ocurre casi siempre, los gestos y el cuerpo hablan cuando son captados por las cámaras. Y las fotos son fieles pruebas de que, al menos en lo que se ve, la relación de la novena en la línea de sucesión con la primera en este orden no es ni parecida a la que disfruta con Victoria Federica. Un misterio que rodea su amistad –si es que la hubiera- y que ninguno de los padres de ambas familias prefiere que trascienda.