REINA LETIZIA
Los privilegios que el Rey Felipe y la Reina Letizia cargan a cuestas
Los Monarcas saben que podrían perjudicar a su hija, la Princesa Leonor.
El Rey Felipe y la Reina Letizia luchan a cuestas para limpiar la pesada herencia que les ha dejado su antecesor. Ambos embarcan la misión más difícil de sus vidas que afectará directamente a la Princesa Leonor, su primogénita. Pero, en algunos aspectos, no están haciendo las cosas bien.
La realeza es consciente de los constantes ataques que recibe por parte de los sectores que no acuerdan con el sistema monárquico. Muchos insisten en que su rol ya es obsoleto, no tiene que ver con los tiempos modernos y que se desperdicia, de alguna manera, esos ingresos que se perciben de la recaudación pública para sostener a los nobles.
Siempre se ha cuestionado el hecho de que gran parte de la recaudación pública sea asignada a sostener el elevadísimo nivel de vida de los Reyes, afectando de alguna manera a la Princesa Leonor y a la Infanta Sofía. Históricamente, año tras año, el presupuesto para mantener al Rey Felipe y a la Reina Letizia aumenta un 1,5%.
Esta información fue ponderada por el medio “Merca2”, quien analiza la importante suma que ha habido en la cuenta bancaria del Rey Felipe y la Reina Letizia, sin contar lo que ya actualmente tiene en su cuenta la Princesa Leonor como cortesía de todos los contribuyentes. Yates privados, vacaciones lujosas y autos de primera gama son las necesidades de la realeza completamente cubierta por el aporte popular.
La medida del Rey Felipe de quitar los ingresos a su padre el año pasado causó revuelo, opiniones contradictorias y celebración por parte de algunos sectores. No coincide la visión que quiere dar de realeza con el sostenimiento de una persona poco leal como lo fue el Rey Juan Carlos.
De todos modos, Felipe de Borbón y Letizia Ortiz intentan minimizar al máximo los riesgos para que la Princesa Leonor no sufra estas etiquetas. El Rey Felipe ha publicado por voluntad propia sus ingresos, pero la Reina Letizia no lo ha hecho. Sea como sea, intentan dar una buena imagen en cuanto a lo monetario, pero aún así resulta obsoleto.
