La impensada coincidencia entre la Reina Letizia y Charlène de Mónaco

Muchos lo dicen y lo dan por hecho. Una mala relación que lleva años, desde antes de 2010. Nadie sabe a ciencia cierta el porqué, pero hay rumores, hay hipótesis. La Reina Letizia y Charlène de Mónaco, ¿enemigas no declaradas? ¿También tienen algo en común?

Contra todos los pronósticos, una impensada coincidencia comporten la Consorte del Rey Felipe y la sucesora de Grace Kelly. Son tan parecidas, en este sentido, que seguramente quedarán espantadas.

Al parecer, ni la Reina Letizia ni Charlène de Mónaco serían muy aficionadas a una actividad. Un tipo de evento en particular, con gente muy especial. Hablamos de los encuentros con la realeza. Así como lo leen. La Monarca y la princesa serían grandes detractoras de compartir tiempo con integrantes de las Casas Reales europeas.

Y a las pruebas nos remitimos. En el caso de la monegasca, hace algún tiempo, cuando se rumoreaba que el divorcio de su esposo el Príncipe Alberto estaba al caer, trascendió que habían llegado a un acuerdo para continuar con la relación a cambio solo de asistir a algunos eventos importantes para no dar una mala imagen. Y, finalmente, pasó. Julio llegó con Carolina de Mónaco, cuñada de Charlène de Mónaco, haciendo las veces de Primera Dama en la entrega de premios de la Escuela de Artes Plásticas, un encuentro con gran presencia de royals y de familiares Grimaldi.

Por el contrario, la primera aparición pública que ha elegido tener Charlène de Mónaco junto a su familia ha tenido lugar en el marco del Gran Premio de Fórmula 1 que se realizó en su país. Lo que marca ciertas preferencias de la esposa de Alberto I. Este año se espera una nueva ausencia de la Princesa en el tradicional Baile de la Rosa, un evento benéfico que aglutina a una cantidad incalculable de miembros de la realeza.

El caso de la Reina Letizia es bien conocido. Fueron varios los desplantes que la Monarca ha tenido con numerosas Casas Reales europeas, decisiones por las que el propio Rey Felipe ha debido salir al cruce y poner el pecho en solitario para evitar mayores consecuencias. El último caso, la cena de cumpleaños de la Princesa Ingrid Alexandra.

Por el contrario, Doña Letizia nunca tiene problemas de participar y presidir eventos en los que la realeza no tenga protagonismo, como lo demostró en la última cumbre de la OTAN, en la que se lució de punta a punta.

Quién diría, entonces, que la Reina Letizia y Charlène de Mónaco tendrían, a pesar de las diferencias que las separan, al menos una cosa en común.