Un curioso detalle ha llamado poderosamente la atención del Palacio de Buckingham. Más que eso, ha encendido absolutamente todas las alarmas de la residencia real y edificio en el que se materializa el poder de la Monarquía británica. La responsable es Kate Middleton.

¿Qué hizo la Duquesa de Cambridge? ¿Qué acción pudo ser tan grave como para alertar a más de la mitad de los laderos de la Reina Isabel y al mismísimo Príncipe Guillermo, su esposo?

Ocurrió este último martes. Kate Middleton y su esposo el primogénito del Príncipe Carlos, y su hija Charlotte se dieron cita en los Commonwealth Games al mediodía para ver la competición de natación en el Sandwwell Aquatics Centre de Birmingham.

La presencia de la esposa del Príncipe Guillermo siempre se roba toda la atención del lugar, pero, esta vez, fue otra cosa lo que captó todas las miradas. Una omisión, un elemento faltante. Algo importante no estaba en su lugar. ¿Qué podía ser? Sin un sombrero de los que suele utilizar en verano para distraer la vista, todas las miradas se posaron sobre sus manos. ¡El anillo de compromiso! ¿Dónde está el anillo de compromiso de la Duquesa?

Son pocas las ocasiones en que la Duquesa de Cambridge se desprende de la joya que un día perteneció a su suegra que nunca tuvo el gusto de conocer, Lady Di. Por eso es que llamó tanto la atención que no llevara la prueba material más valiosa del amor que comparten con Guillermo de Cambridge, ya que, además, no estaba previsto que practique algún deporte como sí ocurrió el pasado domingo, cuando se lo quitó para participar de una regata con el equipo olímpico del Reino Unido.

No es nuestra intención avivar llamas de la polémica donde quizás no la hay, pero no podemos pasar por alto el acontecimiento que antecede a la decisión de Kate Middleton por mostrarse sin su más preciada joya romántica. También el domingo pasado, mientras Kate hacía las veces de marinera, el Príncipe Guillermo asistía a la consagración del equipo femenino de fútbol inglés en la Eurocopa. En esa ocasión se ha salteado todos los protocolos habidos y por haber y a repartidos abrazos y besos a mansalva. Uno de esos ha quedado inmortalizado en una polémica foto. ¿Se habrá molestado la Duquesa?

El origen del anillo

El famoso anillo de zafiros y diamantes fue fabricado por el londinense Garrard, nombrado joyero de la Corona en 1843. Se trata, ni más ni menos, del anillo de compromiso que el Príncipe Carlos le obsequió a Lady Di en febrero de 1981. Con un zafiro de Ceilán de 12 quilates rodeado por 14 diamantes solitarios, está engastado en oro blanco de 18 quilates.