El Príncipe Harry condenado a un papel secundario en el funeral de la Reina Isabel

El Príncipe Harry ocupó la segunda fila junto a su esposa Meghan Markle durante el servicio religioso que se brindó a la Reina Isabel en la abadía de Westminster. Lo que parecía ser nuevamente la unión de la Familia Real, se convirtió en un papel secundario para los Duques de Sussex.

Acaparados por los medios internacionales durante estas semanas y sin que se quite el foco de la pareja, el nieto de la Reina Isabel fue ubicado en la segunda fila, justo detrás del Rey Carlos y la Reina Camila, junto a Beatriz de York y su marido Edorado Mapelli Mozzi. En un día que pasará a la historia, el Príncipe Harry y Meghan siguen siendo desplazados, a diferencia de otros miembros de la familia.

La primera fila fue ocupada por el Rey Carlos y su esposa Camila; la Princesa Ana y su marido Timothy Laurence; además de los Príncipes Andrés y Eduardo, este último acompañado de su esposa Sofía de Wessex. En el banco de al lado, también en primera fila, se ubicaron los Príncipes Guillermo y Kate Middleton junto a sus hijos, George y Charlotte, quienes asistían por primera vez a un acto oficial dentro de la Corona británica. También se ubicaban en este sitio Peter Phillips, Mike y Zara Tindall, los otros nietos de la Reina Isabel.

En la vigilia del pasado sábado, el Duque de Sussex compartió junto a sus primos, luego de que se le otorgara un permiso espacial en el que lució su uniforme militar para ofrecer sus respetos a la memoria de su abuela. Pero algo sucedió y justamente no fue de mucho agrado para Harry, ya que las iniciales de la Reina "ER" (Elizabeth Regina) fueron quitadas de su vestimenta real. Algo que no sucedió con su tío, el Príncipe Andrés.

Cabe recordar que tanto el hijo menor del Rey Carlos como su tío fueron destituidos de sus títulos militares, por lo que tienen prohibido usar la vestimenta que representa a la Corona británica. A pesar de esto, ambos obtuvieron la autorización durante las vigilias que rendían honor a la Reina Isabel.

Harry y Meghan Markle habían pedido la salida de "La Firma" y desde hace dos años son considerados personas no gratas dentro del Palacio de Buckingham. Esto motivó a que a último momento Doña Isabel cambiara su testamento, desheredando a su mujer, la Duquesa de Sussex y a su hija Lilibeth, empeorando su malestar.