REY JUAN CARLOS

El incidente de Froilán y las profundas consecuencias que podría traer al Rey Juan Carlos

Derrumbaría un plan familiar.
lunes, 2 de enero de 2023 · 12:30

Por más que la Infanta Elena se esmere, nada puede hacer para torcer los desempeños nocturnos de su hijo mayor, Froilán de Marichalar, y es posible que deba comerse un marrón, que podría tener consecuencias incluso para el Rey Juan Carlos

Es que al bueno de Froilán de Marichalar no hay con qué darle y, aunque se esfuercen por ocultarlo, siempre habrá alguien que lo delate, como ocurrió con el último incidente que lo tuvo envuelto.

Froilán de Marichalar, Victoria Federica y la Infanta Elena tenían todo listo para viajar esta semana a Abu Dabi. Fuente: (Instagram).

Al muchacho le pesa demasiado ser el nieto del Rey Juan Carlos y, a pesar que lo desee, no podrá nunca sacarse de las espaldas que es un Borbón y tiene que atenerse a las consecuencias de sus actos. 

Según deslizaron algunos medios, la participación de Froilán de Marichalar en una pelea con navajas, ocurrida el pasado 25 de noviembre en las inmediaciones de una discoteca en Madrid, han puesto de muy mal rollo a la Infanta Elena, que podría intentar castigarlo cancelando un viaje previsto hasta Abu Dabi.

Sucede que el próximo 5 de enero el Rey Juan Carlos cumplirá 85 años y tanto la Infanta Elena como la Infanta Cristina había preparado un vuelo con todos sus hijos para acompañar al Emérito, que está radicado desde hace dos años en el Emirato.

En el último cumpleaños del Rey Juan Carlos tampoco estuvo presente Froilán de Marichalar. Fuente: (Instagram).

Pero la exposición que tuvo el sobrino del Rey Felipe durante la última semana de 2022, aunque aseguró en un comunicado que no tuvo ninguna participación, ha hecho que su madre se replantee los proyectos en común.

Desde Barajas estaban informados del inminente viaje de las Infantas con sus hijos, algo que se terminará de definir en las próximas horas, cuando se revele si por culpa de Froilán de Marichalar su madre decidirá cancelar o, simplemente, dejar al chaval castigado en casa, un apartamento de 500 m2, con dependientes en el barrio Niño Jesús de Madrid. ¡Vaya correctivo!