RECETAS
Yogur Casero sin Máquina: Un Placer Cremoso Hecho en Casa
Descubre cómo hacer yogur casero sin necesidad de una máquina especializada. Con unos simples ingredientes y un poco de paciencia, podrás disfrutar de un yogur delicioso y cremoso, personalizado a tu gusto, directamente en tu cocina.El yogur casero es una delicia cremosa que puedes preparar en la comodidad de tu hogar, y lo mejor de todo es que no necesitas una máquina especial para hacerlo. En este artículo, te guiaremos a través de un sencillo proceso paso a paso para crear tu propio yogur casero sin complicaciones.
Aprenderás a seleccionar los ingredientes adecuados, calentar y fermentar la leche, y personalizar el sabor a tu gusto. Disfrutar de un yogur casero, fresco y repleto de cultivos probióticos es una experiencia gratificante que no solo te permitirá disfrutar de su sabor único, sino también de sus beneficios para la salud. ¡Acompáñanos en esta emocionante travesía culinaria!

Ingredientes:
1 litro de leche entera (preferiblemente orgánica)
2 cucharadas de yogur natural sin azúcar, con cultivos vivos y activos
Opcional: azúcar o miel al gusto, frutas frescas, nueces o granola para acompañar.
Paso a Paso:
Reúne los ingredientes necesarios para crear tu yogur casero. La elección de leche entera es clave para obtener un yogur más cremoso, pero puedes experimentar con otras variedades si lo prefieres. Asegúrate de que el yogur natural que usarás como starter contenga cultivos vivos y activos, ya que son esenciales para la fermentación.

Vierte la leche en una cacerola y caliéntala a fuego medio, revolviendo ocasionalmente para evitar que se queme en el fondo. Lleva la leche a una temperatura de aproximadamente 85°C. Puedes usar un termómetro para asegurarte de que no se sobrecaliente.
Luego de calentar la leche, retírala del fuego y deja que se enfríe hasta que alcance una temperatura de unos 43°C. Puedes acelerar el proceso colocando la cacerola en un recipiente con agua fría. Una vez que la leche esté a la temperatura adecuada, añade las dos cucharadas de yogur natural y mezcla bien para incorporar el starter.
Vierte la mezcla en frascos de vidrio o recipientes herméticos, y tápalos. Coloca los frascos en un lugar cálido y oscuro para que fermente durante al menos 6 a 8 horas, o incluso toda la noche. Cuanto más tiempo dejes que fermente, más espeso será el yogur.
Una vez que el yogur haya fermentado al gusto, refrigéralo durante al menos 4 horas para detener el proceso de fermentación. Luego, puedes disfrutar de tu yogur casero tal cual o agregarle azúcar, miel, frutas frescas, nueces o granola para personalizarlo a tu gusto. ¡Listo! Ahora tienes un delicioso y saludable yogur casero sin necesidad de una máquina especializada.