Amalia de Holanda admite que ha perdido la libertad por las amenazas recibidas

La Familia Real holandesa terminó su tour por el Caribe. El principal objetivo de este viaje fue que Amalia de Holanda conociese las islas que forman parte del territorio del reino. Una travesía que, durante unos días, la sacó del atrincheramiento involuntario que vivió el año pasado tras las amenazas de secuestro e incluso asesinato, que recibió por parte de un grupo organizado.  

Feliz y radiante junto a sus padres, Amalia de Holanda ha mostrado su gran etilismo y profesionalismo, desenvolviéndose de la mejor manera en el destino caribeño. Durante la despedida, concretamente en la rueda de prensa, ha podido sincerarse ante el frenesí de preguntas de los periodistas.  

"Voy a ser sincera, todavía lo estoy pasando muy mal", confesó la Princesa de los Países Bajos. Luego, se explayó: "Echo de menos la vida normal, la vida de estudiante: andar por la calle, poder ir a una tienda".  

A pesar de lo duro que está siendo tener que vivir una vida sin poder disfrutar de las cosas que normalmente hacen y vivencian los jóvenes de su edad, agradeció los "días maravillosos" que pasó durante su estadía en el Caribe.  

La hija Guillermo Alejandro y Máxima, no dudó en reconocer que se siente “feliz por la libertad de las últimas semanas y la acogida de las seis islas" e hizo una mención especial a sus padres, cuestión en la que enfatizó que a ella aun le faltan muchas más visitas para tener la misma desenvoltura que demuestran sus padres.