La decisión del Príncipe Harry y Meghan Markle que mantiene en vilo a la Familia Real británica

La coronación del Rey Carlos está en marcha y en unos días se enviarán las invitaciones formales, entre las que figuran las del Príncipe Harry y Meghan Markle, que todavía no tienen claro si asistirán al evento más importante de la Familia Real en el último siglo, algo que no hace más que endurecer las tensiones entre las partes. 

Es cierto que desde la publicación de las memorias del Príncipe Harry, sumado al vendaval desatado por la serie "Harry & Meghan" (Netflix) la relación del Duque de Sussex con los Windsor no hizo más que ensombrecerse aún más.

Sin embargo, el Rey Carlos no quiere que su hijo esté ausente en el día más importante de su vida. Pero para que eso suceda, el Príncipe Harry pidió tener un encuentro con su padre y su hermano, el Príncipe Guillermo, para aclarar los tantos, después de tanto enojo y rencor. 

En la ceremonia, se sabe, el Príncipe Harry y Meghan Markle no tendrán un papel protagónico. Y aunque lo aceptan, no están decididos a lidiar con una "atmósfera tóxica", como publicó el diario The Mirror, algo que parece que ya sintieron durante el Jubileo de Platino de la Reina Isabel y luego en su funeral.

Otro de los puntos que limita la decisión del Príncipe Harry y Meghan Markle es que su hijo mayor, Archi, ese 6 de mayo cumplirá los cuatro años y no quieren perderse el festejo. Lo que nadie aclaró nunca es por qué no piensan llevarlo con ellos hasta Reino Unido, por lo que a muchos les suena más a una excusa que otra cosa. 

Para que no haya especulaciones ni malos entendidos, el Rey Carlos ya decidió que será el Príncipe Guillermo el único que se arrodillará ante él, luego de la coronación, excluyendo así a su hijo menor, algo que seguramente no le habrá sentado bien.

A la última palabra la tendrán el Príncipe Harry y Meghan Markle, que deberán despejar rápidamente las dudas, para que la organización pueda tener la certeza de si les harán o no lugar.