La grave acusación que pesa sobre el Rey Juan Carlos por Jaime Marichalar

Las relaciones de Jaime de Marichalar con la Familia Real se terminaron por completo cuando se anunció su divorcio con la Infanta Elena, hace más de 12 años y todavía, al parecer, hay heridas que no cierran o, mejor dicho, que supuran después de conocidos los privilegios con los que gozará Iñaki Urdangarin cuando selle su separación legal con la Infanta Cristina. 

Las cosas cambiaron para siempre en la vida de Jaime de Marichalar, que supo tener buenas migas con el Rey Juan Carlos, cuando el 13 de noviembre de 2017 desde Casa Real confirmaron el "cese temporal de su convivencia matrimonial" con la Infanta Elena. 

Desde ese momento, el ex Duque de Lugo se tomó su tiempo y tardó cerca de 3 años para terminar los papeles de su divorcio. Con él, debió dejar el tratamiento de Excelencia y de Grandeza de España, además de su lugar en la Familia Real, en la web de Casa Real, entre otros privilegios.

Ahí es donde radica la disconformidad del padre de Froilán con el Rey Juan Carlos, puesto que además de perder la custodia de sus hijos y de marcharse sin un céntimo, perdió los viajes gratuitos en Ibera y sus empleos en empresas como FCC y Winterthur.

Esos beneficios le habían sido concedidos a Jaime de Marichalar por el Emérito, que no titubeó en retirarlos cuando armó sus valijas y se marchó con sus petates. 

Así fue como Jaime de Marichalar tuvo que comenzar de nuevo, lejos de los flashes y de los intereses de la Monarquía, pero dando pasos firmes en el mundo de la moda, en donde supo hacerse lugar entre las más grandes firmas de Europa.