FROILÁN

Así viene siendo la vida de Froilán en Abu Dabi, por ahora con pocos amigos

Entre la envidia y la lástima.
domingo, 12 de marzo de 2023 · 10:31

La salida de Froilán de España no ha hecho que los medios pierdan interés en su día a día. Al contrario. Aunque se haya ido a más de 5 mil kilómetros de distancia, siempre tendrá la atención, sobre todo de los que están esperando que la líe un poco más. 

En la edición del sábado de "Aruser@s Weekend" (La Sexta) contaron algunos detalles sobre la vida que lleva Froilán en Abu Dabi, en donde a pesar de tener cerca al Rey Juan Carlos, parece que no se frecuentan demasiado. Pero sí hablan algunas veces por semana.

Froilán se pasa los días aburrido en Abu Dabi. Fuente: (Instagram).

Para Alfonso Arús, la estadía del hijo de la Infanta Elena en el Emirato Árabe "da cierta envidia", porque es un chaval de 24 años, al que todavía le restan dos materias para terminar sus estudios universitarios en negocios y ya tiene un cargo de ejecutivo en una petrolera.

Por supuesto que todo es por gentileza del Rey Juan Carlos, que para su nieto preferido a buscado lo mejor y no ha dudado en hablar con sus amigos para encontrarle un puesto a su medida.

Tal como lo ha contado Tatiana Arús, Froilán estaría radicado en un apartamento de un complejo de edificios de 76 plantas, muy cerca de la zona céntrica de Abu Dabi e incluso de las oficinas de la compañía petrolera en la que cumple funciones durante ¡8 horas al día!

Froilán mantiene comunicación directa con sus colegas gracias al móvil. Fuente: (Instagram).

Pero claro, con tanto sacrificio puesto en el día a día, Froilán necesitaba una buena paga para quedarse allí. Y es que según deslizaron en el plató, el hermano mayor de Victoria Federica estaría llevándose a los bolsillos unos seis mil dólares mensuales ya que la compañía que lo contrató se encarga de la vivienda, el traslado y de algunas otras cuestiones más.

Cuentan por ahí que Froilán ya está necesitando a sus amigos y que para Semana Santa podría llegar a tener novedades de sus colegas, a los que recibiría con los brazos abiertos y, como es su costumbre, con los bolsillos llenos. 

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