Este 10 de junio el Rey Juan Carlos tenía pensado regresar a España por segunda vez desde su exilio en Abu Dabi. Sin embargo, para los desmemoriados, sus planes fueron cancelados a pedido del Rey Felipe, quien durante la estadía fugaz del Emérito en Sanxenxo le escupió un largo y duro sermón y lo mandó de vuelta por donde vino hasta que se le avise lo contrario.

Este miércoles, en tanto, se conoció cuál sería la verdadera razón por la que el Monarca retirado habría accedido a no volver a pisar suelo español a la espera de ser llamado. Y, lo más terrible aún, es que hay quienes apuntan rápidamente las miradas a su hijo Don Felipe, a quien le atribuyen la treta planeada en conjunto con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.

Es que ahora al Rey Juan Carlos lo quieren investigar por los viajes de cacería que realizó desde 2014, poco tiempo después de abdicar al trono en favor de su hijo, el Rey Felipe. Hacienda quiere saber, sorpresivamente después de que el Emérito pisó España sin aviso, quién pagó por los viajes en avión y los gastos de esos recordados paseos de caza.

La situación levanta sospechas principalmente entre los allegados y todavía queridos del Emérito, quienes ahora se preguntan por lo que se habló en realidad en esa larga y tensa reunión de más de cuatro horas en Sanxenxo, durante la visita del exmonarca en la que fue muy bien recibido y vitoreado por los habitantes del lugar, cuestión que generó bastante molestia entre los funcionarios más encumbrados del gobierno español.

Preguntas sin respuestas

¿Acaso el Rey Felipe le adelantó al Rey Juan Carlos sobre la investigación que iniciaría Hacienda? ¿Fue para protegerlo y evitarle una vergüenza? ¿O acaso se trató de una amenaza para asegurarse de que no regrese?

Una serie de preguntas quedarán sin respuestas hasta nuevo aviso. Pero lo único claro es que el próximo 10 de junio España no contará con la presencia de su Rey Emérito, desterrado por segunda vez por su hijo Felipe VI.