REINA LETIZIA

La Reina Letizia podría romper una de sus grandes promesas, el Rey Felipe no lo imaginaba

La Consorte no para de sumar polémicas.
lunes, 1 de agosto de 2022 · 02:30

El verano es una de las temporadas más importantes para la Reina Letizia y el Rey Felipe, una época del año en la que toda la familia Real acostumbra a reunirse y pasar unos días de descanso y ocio en el palacio de Marivent en Mallorca. El lugar alberga los mejores recuerdos de la familia, y sigue siendo un especial punto de encuentro para los Borbón, a pesar de la crisis institucional que atravesado en la corona en el último tiempo.

La Reina Letizia podría romper una gran promesa. Foto: (Instagram).

La Reina Letizia visitó por primera vez esta localidad en 2004, tan sólo unos meses luego de pasar por el altar con el Rey Felipe. Fue hace casi dos décadas, y, para el momento, la Consorte no se esperaba el aplomo que llegó a tener en el lugar. Sin duda, no fueron unas vacaciones fáciles para Letizia, quien además afrontaba muchos cambios en su vida.

La Reina Letizia durante unas vacaciones en Mallorca. Foto: (Imagen de archivo).

Se conoce que la Reina Letizia sintió mucha presión al ser el centro de atención de Mallorca en aquellas vacaciones de 2004. No estaba cómoda ni tranquila en ninguno de los actos oficiales en donde le tocó acompañar al Rey Felipe. Este año, la Reina Letizia podría reencontrarse con uno de sus mayores miedos, pues se espera que en esta oportunidad asista al palacio de la Almudaina donde será la encargada de presidir la recepción de las autoridades y representantes de la sociedad balear; este es uno de los lugares que mayores recuerdos le traen a la esposa de don Felipe, y por el que se habría prometido no volver a repetir tal incomodidad.

Las vacaciones incómodas de la Reina Letizia

La Reina Letizia y el Rey Felipe en las vacaciones de 2004. Foto: (Imagen de archivo).

Fue precisamente en las vacaciones de 2004 donde la Reina Letizia acudió a ver las regatas vestida de manera prácticamente idéntica cada día, para así disipar el interés de la prensa sobre su persona. Era evidente que no quería ser el centro de atención de aquellos eventos, aunque en definitiva, no pudo evitarlo.