REINA LETIZIA

La soledad inevitable para la que se preparan la Reina Letizia y el Rey Felipe

Es prácticamente un hecho.
viernes, 5 de agosto de 2022 · 05:00

No es que no lo supieran. Aunque, a diferencia de lo que pasa en otras familias más comunes, las fechas se postergan un poco más. No sería el caso de la Reina Letizia y del Rey Felipe, quienes se enfrentan a la dura realidad de la inminente soledad que los amenaza, más temprano que tarde. Depende solo de ellos.

Con la fecha de regreso de la Princesa Leonor al UWC Atlantic College ya confirmada, la Consorte Real y el Monarca ven como una posibilidad más que cierta que al cabo de unos meses algo similar pueda ocurrir con su hija menor, la Infanta Sofía.

El día más triste de la Reina Letizia y el Rey Felipe, en la despedida de Leonor rumbo a Gales. Fuente: (Instagram).

La hermana de la heredera al trono iniciará en septiembre el cursado de su cuarto año de la ESO en el colegio privado Santa María de los Rosales, en Madrid, institución a la que solía asistir con su más grande cómplice antes de que ésta partiera rumbo a Gales.

Se trata, ni más ni menos, que de la última etapa de la Infanta Sofía antes de tomar una determinación clave para su futuro. ¿Seguir los pasos de la Princesa Leonor o seguir estudiando en España? La decisión será conjunta, de la Reina Letizia -sobre todo- y de la princesa más joven que, a diferencia de su hermana, tiene opción de ser lo que quiera y no lo que deba.

El Rey Felipe y la Reina Letizia, cuando sus hijas eran compañeras de colegio, en Madrid. Fuente: (Instagram).

No sería extraño, conocido el gran vínculo que une a las hermanas, que la menor de las Borbón y Ortiz opte por continuar con su educación en Gales. De ese modo, volvería a ser compañera de escuela de la Princesa Leonor. Una decisión que sentenciaría a Doña Letizia y a Don Felipe a la profunda soledad como pareja real.

Una decisión que, sin dudas, causaría sensaciones encontradas a la Reina Letizia y al Rey Felipe. Tristeza, por un lado, al no contar con ninguna de sus hijas cerca. Y orgullo, por otra parte, al ver cómo crecen académicamente para un futuro próspero y brillante. Queda esperar...