Rocío Carrasco vuelve a ser protagonista en todos los medios de comunicación debido a un nuevo capítulo de “En el nombre de Rocío”, su serie documental. En esta oportunidad, la colaboradora de televisión contó su versión de los hechos acerca de las peleas con sus hermanos, José Fernando y Gloria Camila.

En cuanto a José Fernando, la hija de Rocío Jurado reconoce que es una persona con muy buenos valores y un gran corazón. “Es el mejor de esa familia, con muchísima diferencia. Nunca tiene una mala palabra para nadie”, expresó Carrasco en su documental.

Sin embargo, no tiene contacto con él desde que se desató una fuerte pelea entre ambos, relacionada con cuestiones de dinero y herencia: “Cuando cumple 18 años, me llama por teléfono y dice que quiere venir a mi casa a hablar conmigo. Cuando llega, me dice que necesita que lé de todos los papeles de la herencia de mi madre y le digo que eso le corresponde a su padre. Era lo que a mí me hubiera gustado que hubiesen hecho como madre si fuese mi hijo", contó la presentadora.

La respuesta de su hermana enfureció a José Fernando y, según contó Rocío Carrasco, dejó la casa “despotricando”. Además, en ese entonces, el hijo de José Ortega Cano sufría problemas relacionados con la salud mental, razón por la que su familia temía qué podía llegar a hacer con ese dinero. Hasta el día de hoy, continúa con su proceso de recuperación.

De hermanas a enemigas

Por otro lado, la relación entr Carrasco y su hermana, Gloria Camila, ha empeorado con el paso del tiempo. La colaboradora de televisión recuerda que ambas eran muy unidas y disfrutaban pasar tiempo juntas.

Años más tarde, tuvieron una fuerte discusión que derivó en el fin de su vínculo como hermanas. Se trata de un momento en el que Gloria atravesaba una “adolescencia difícil” y, al mismo tiempo, Rocío Flores, hija de Rocío Carrasco, había hablado mal públicamente de su madre.

“Ortega me llama y me pide que hable con ella. Fue una conversación entre una hermana mayor y una pequeña. Ella reaccionó bien”, expresó la hija de Jurado. Sin embargo, parece que las palabras de Carrasco enfurecieron al torero: “Me dice que quién me creo yo para decirle a su hija cómo se tiene que comportar. Que yo no soy su madre. Con el tiempo, se le ha ido intoxicando y ha dado lugar a que ella tenga esa actitud y ejecute la acciones que ha realizado en mi contra”, explicó Rocío sobre cómo, de un momento a otro, la relación con su hermana cambió por completo.